El pasado 31 de enero, se celebró en Mérida la I Jornada de la Mesa de Trabajo de Cine Extremeño. Un evento propuesto por la Academia de Cine de Extremadura con el objetivo de contextualizar el momento del sector en la región –marcado por el despertar creativo y empresarial de profesionales que operan en Extremadura y cuyo trabajo se expande con éxito nacional e internacionalmente—, y el de proponer diferentes medidas que ayuden a impulsar una industria en auge que cuenta la mejor generación de creadores y técnicos –directores, productores, actores y especialistas— de su historia. Extremadura no solo es una tierra donde se rueda cine; sino que también es una tierra donde se crea y se produce ficción y no-ficción con una entidad e identidad propias. La I Jornada de la Mesa de Trabajo de Cine Extremeño supone la instauración de un punto de encuentro entre profesionales e instituciones en aras de potenciar un sector que ha demostrado, junto a su aportación cultural y divulgativa, un evidente potencial económico desde todas las dimensiones posibles –desde lo sectorial a lo laboral.
El nacimiento de la Academia de Cine de Extremadura coincide con el despertar identitario, con la necesidad de que el cine extremeño cuente sus historias desde una narrativa y una estética propias. «La Academia de Cine de Extremadura ha nacido para proteger, promover y promocionar el cine extremeño y su industria. La trayectoria y el creciente talento de los y las profesionales de Extremadura en la última década, reconocidos a nivel nacional e internacional, ha conseguido que nuestra cultura y nuestra identidad se difunda por todo el mundo a través de sus películas», sostuvo en su presentación la Presidenta de la Academia de Cine de Extremadura, Silvia Venegas Venegas. Para ello, desde la propia Academia se han creado diferentes comisiones (relativas a Industria, Comunicación y Educación) para que diseñen una planificación que dé respuesta a las necesidades del sector audiovisual regional. A su vez, se subrayó en el acto la importancia que tiene la colaboración con las instituciones gubernamentales, ya que se debe establecer una sinergia, un circuito estable y actualizado que permita hallar caminos que fortalezcan una industria en clara expansión.
Es por ello, que se propuso un paquete de medidas de actuación urgentes para equiparar el sector cinematográfico extremeño con otros homólogos nacionales. Medidas que se plasmarían en un «Plan de Impulso y una estrategia competitiva que reconozca las problemáticas propias de nuestra región y solvente la dificultad de creación desde las zonas periféricas potenciando la industria regional junto a los profesionales y las empresas extremeñas». Junto a esto, también se propusieron acciones necesarias como una «Mejora del organigrama actual (…) con la creación de una Dirección General del Cine en esta legislatura»; la «Ampliación de la Inversión económica y de incentivos»; una reformulación de la legislación, ya que «la actual carece de recursos y está obsoleta»; la dotación «a la televisión pública extremeña, Canal Extremadura, de un presupuesto y un espacio que fomente la industria cinematográfica a través de películas y series regionales»; o la creación de un «Plan coordinado desde la Academia de Cine de Extremadura con Avante y Extremadura Film Commission para la internacionalización de las producciones extremeñas y la mejora de la competitividad en el exterior».