Nos informan que “Una terapia de mierda“, cortometraje documental nominado a los Premios Goya 2024, supera los 138.000 visionados en el canal de YouTube del aguerrido periodista de investigación Carles Tamayo @TAMAYOSTUFF y en la plataforma FILMIN.
A su nominación al máximo premio del cine español, el corto dirigido por Javier Polo suma dos importantes galardones cinematográficos, el Feroz Cinema Jove, y el Premio Berlanga de la Academia Valenciana del Audiovisual.
Con este singular documental de doce minutos, “hemos querido abrir una ventana a la reflexión de que algo estaríamos haciendo mal como sociedad”, afirma Polo, “si dos personas se inventan un tratamiento con caca e imanes y la gente se lo cree”. Comparte la cita con sus socios productores para esta película, Juanjo Moscardó Rius, Jorge Acosta Sánchez, Nathalie Martínez y Maxi Valero, porque “cuando dejas de creer en la ciencia, acabas creyéndote cualquier mierda”.
Los protagonistas de esta aventura son los biólogos Fernando Cervera y Mariano Collantes, que interpretan, a modo de parodia, su historia real, alertando del peligro de las pseudociencias. “Una terapia de mierda refleja un problema muy grave: es muy sencillo que nos engañen con algo tan importante como es nuestra salud”, aseguran.
¿De qué va?
En 2012, dos estudiantes de biología crearon el fecomagnetismo, una parodia de las pseudoterapias que aseguraba curar todo tipo de enfermedades mezclando caca con imanes. Solo querían hacer una crítica original y divertida pero se les fue de las manos. ¿Cuánto tiempo tardaría la gente en darse cuenta de que todo alrededor de la fecomagnetoterapia era falso?
