“El valle de Concavenator”, de Víctor Matellano, es uno de los largometrajes documentales candidatos al Goya 2024. Tras su paso por las últimas ediciones del Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya (Sitges 2022), el Mórbido Film Fest, el Festival Internacional de Cine de Almería (FICAL), el Festival de Cine Fantástico de Canarias ISLA CALAVERA, y de su participación en la Bienal Ciudad y Ciencia. Ciclo de cine de naturaleza contemporáneo, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, podría dar la sorpresa en la temporada de premios.
Matellano, director de cine y teatro, además de escritor cinematográfico, rodó “El valle de Concavenator” a caballo entre España e Inglaterra y ha contado con profesionales internacionalmente reconocidos como Colin Arthur, maestro de los efectos especiales en películas como 2001: una odisea del espacio y La historia interminable, y colaborador de Harryhausen; y el prestigioso paleontólogo José Luis Sanz, uno de los responsables del descubrimiento de Concavenator corcovatus y gran amante del cine.
El guion, escrito a cuatro manos entre Victoria Vázquez y Matellano, es un viaje por la fascinación que suponen los dinosaurios a grandes y pequeños propiciada, fundamentalmente, por el cine y heredera de la admiración que desde siempre el hombre ha tenido por los dragones o las serpientes de mar.
Se trata de una producción de EMB Documental, The Other Film Production, 39 Escalones Films, ViMa PC e Infilmity que cuenta con el apoyo de la Fundación Ray Harryhausen y del Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha.
¿De qué va?
Unas investigadoras preparan un proyecto sobre la dinomanía a partir de dos dinosaurios, uno ficticio y otro real: el carnívoro de El valle de Gwangi, de Ray Harryhausen; y la especie única Concavenator corcovatus encontrada muy cerca del lugar de rodaje de aquella película. Para ello contactan con Colin Arthur, mago de los FX, colaborador de Harryhausen, y con José Luis Sanz, uno de los paleontólogos que descubrió Concavenator corcovatus.
