Como todos sabemos uno de los principales problemas del cine español es que se ve poco fuera de nuestras fronteras.
Una prueba de ello es que el año pasado nuestro cine sólo sedujo a un 1,4% del público europeo frente al 2,1% de 2007 y el 2,8% de 2006, y ninguna producción española figuró entre las 20 películas europeas más vistas.
Además, hay que destacar, que España es el tercer país europeo que más películas hace (150 el año pasado), un resultado sólo superado por Francia (196) y Alemania (151).
El 28,4% de las entradas vendidas en toda Europa fueron para el cine europeo, frente al 63,2% para el estadounidense.
Francia es el país donde el cine nacional goza de mejor salud, con un 45,5% de espectadores, el nivel más alto desde 1984, gracias a grandes éxitos como Bienvenue chez les Ch’tis (Bienvenidos al Norte) o Astérix en los Juegos Olímpicos.
Mal asunto para el cine español; aunque, últimamente, está apostando por hacer cine comercial de gran presupuesto en coproducción con otros países como El Ché, Los Crímenes de Oxford o Ágora.