Cuando parecía que este año solo se estrenarían tres películas de animación españolas (“Tadeo Jones 3”, “Unicorn Wars” y “La orquesta terrestre”), nos encontramos a última hora que “El inspector Sun y la maldición de la viuda negra” se estrenará a finales de diciembre y “Los demonios de Barro“, de Nuno Beato, se estrenará en cines el 25 de noviembre tras celebrar su premiere naconal en el Festival de Cine de Sevilla.
“Los demonios de barro” se ha realizado durante los últimos cuatro años entre las ciudades de Lisboa, A Coruña, Bilbao y Burdeos. Ha contado con un amplio equipo de profesionales de larga trayectoria. Con un presupuesto de tres millones de euros, lleva el sello de Basque Films como Pos Eso (Sam Orti, 2014). La productora vasca liderada por Carlos Juárez ha participado con este film por tercera vez en la Sección Oficial de Annecy, donde también compitió con “Psiconautas, los niños olvidados” (Alberto Vázquez, 2015). Por su parte, Xosé Zapata es el responsable de Sygnatia, productora de films premiados en Annecy como “Arrugas” (2011, Ignacio Ferreras) o “Buñuel y el laberinto de las tortugas” (2018, Salvador Simó).
Se trata de una coproducción hispano-franco-portuguesa de Sardinha em Lata (Portugal), Caretos Films A.I.E. (Galicia), Basque Films (País Vasco) y Midralgar (Francia), que cuenta con la participación de TVG y el apoyo de Eurimages, República Portuguesa, ICAA – Ministerio de Cultura, PIC Portugal, Visit Portugal, Ibermedia, Région Sud, Nouvelle Aquitaine y CPF y Xunta de Galicia.
¿De qué va?
Rosa, una profesional de primera línea, muy valorada en el mercado empresarial, lleva una vida exigente dedicada por completo a su trabajo. La muerte de su abuelo, del que se había distanciado progresivamente por su inagotable trabajo, acaba provocándole un repentino ataque de estrés que pone en duda sus decisiones. Rosa decide entonces abandonar la ciudad y se lanza a buscar el lugar y los recuerdos de su infancia, vivida al lado de su abuelo.
Cuando llega a la propiedad aislada en medio del paisaje montañés, descubre que su abuelo le ha dejado un terreno prácticamente abandonado y la casa de su infancia casi en ruinas. Impulsada por el remordimiento y la necesidad de encontrar un nuevo rumbo para sí misma, intenta reconstruir la casa y los campos. Sin embargo, Rosa no está sola.
Además de las personas con las que establecerá nuevos vínculos, aparece un grupo de demonios de arcilla modelados por su abuelo que parecen, a veces, cobran vida, aconsejándola y guiándola y consolándola, como él mismo habría hecho.
Y qué hay de ‘Black is Beltza 2’? No competiría?