Se le podrían criticar muchas cosas a esta producción independiente, pero “La passió segons Pep Amores” despide en algunas secuencias tal frescura y naturalidad que provoca que le perdonemos todos sus defectos. Los momentos de la borrachera de los protagonistas; el cameo de Santiago Segura: el intento de venta del proyecto a la productora Distinto Films; el discurso del héroe ante sus fieles pidiéndoles dinero; y el momento de la canción “Persiguiendo un sueño” en un bar lleno de desconocidos que, finalmente, también se animan a cantarla; despertarán las risas entre los espectadores.
“La Passió segons Pep Amores”, codirigida y coescrita por Júlia Girós, Pol Picas y Nina Solà, comienza con la presentación de la disparatada idea de cuatro amigos de realizar una película sobre la historia de la unión de tres de ellos, que se dedicaron a la música de jóvenes, realizando un concierto que les sirva de carta de presentación como nuevo grupo llamado “Los Renacidos”. Sin embargo, la verdadera historia de este documental no es esta, sino la odisea que vive y sufre Pep Amores para conseguir financiar esta película. Un viaje de 87 minutos que hará posible que empatizamos con este personaje que es capaz de meter la cabeza en agua con hielo para conseguir un patrocinador para su película.
Si el taquillero y premiado documental “Muchos hijos, un mono y un castillo”, de Gustavo Salmerón, funcionó gracias al personaje de la madre del conocido actor, Julita Salmerón; “La passió segons Pep Amores” nos descubre otro talento natural: Pep Amores.
Tras presentarte en el Barcelona Film Festival llegará a los cines Verdi de Barcelona este viernes 1 de octubre.
