SERIE “NARCOS”, ¿POR QUÉ TUVO TANTO ÉXITO?

Narcos, la serie de Netflix, está basada en la historia de un personaje real, Pablo Escobar. Pablo Escobar fue el mayor narcotraficante de la historia. Se llegó a considerar el hombre más rico del mundo, el cual poseía una fortuna estimada en 30.000 millones de dólares. Pero no solo fue narcotraficante, también fue congresista de Colombia y, su poder lo usó para perpetrar asesinatos por orden suya, crímenes que pagó desde una lujosa cárcel que él mismo diseñó a su gusto, donde estuvo pagando la condena hasta que un día cualquiera aterrizó un helicóptero en mitad del patio de la cárcel y lo liberó, es decir, huyó de su propia creación. Aunque parezca una fábula, ocurrió de verdad. De hecho, más hechos escabrosos sumieron a Colombia en una violencia inaudita provocada por el mismo fundador del Cartel de Medellín.
 
Actualmente, existen muchos documentales, libros, películas e incluso juegos como Narcos online slot desarrollada por el proveedor Netent, uno de los líderes de la industria de los juegos de azar que nos cuentan desde diferentes personajes la vida de este personaje que pudo someter a un país entero, incluso al mundo en el caos profundo.

La serie Narcos en Netflix

Todos los seguidores de Narcos recuerdan muy bien la frase popular de la serie “Plata o Plomo”. Con esta frase el espectador ya se puede imaginar cómo va a ser la serie, que cuenta la historia del cartel de Medellín y la del cartel de Cali. Dos carteles que se disputaban el poder y control absoluto de la distribución de la droga. El cartel de Medellín era liderado por Pablo Escobar, un delincuente que supo tener reconocimiento mundial y que puso en jaque a las autoridades colombianas y estadounidenses, sumiendo al país en el terror y en el caos. Las dos primeras temporadas se centran en el crecimiento y la caída de su organización. La última temporada se centra en el cartel de Cali, liderado por los hermanos Orejuela. Ambas organizaciones son perseguidas por agentes de la DEA de los Estados Unidos.
 
El protagonista…

Wagner Moura un actor brasileño es quién le da vida a Escobar que, contra todo pronóstico, el resultado que tuvo fue muy bueno, teniendo en cuenta que, principalmente, no hablaba bien español. Además, solo se le conocían dos películas: “La élite” (2007) y “Elysium” (2013) con un papel secundario. Valió la pena su fichaje.
Escobar era un personaje con una personalidad tremendamente cautivadora y persuasiva, así que Moura no tardó en echarse al bolsillo al público interpretando tal cual. Además, subió hasta 18 kilos para parecerse al personaje. Su interpretación fue brillante y causó un gran enganche entre los espectadores que una vez lo vieron no pudieron dejar de hacerlo.
El reparto de la serie también lo encabezan, el agente estadounidense de la DEA Murphy (Boyd Holbrook) y Javier Peña (Pedro Pascal). Murphy es el arquetipo del policía, una persona muy carismática, soñadora y muy ambiciosa. Su compañero Peña, por el contrario, es reservado, disciplinado y muy entregado en su trabajo como agente. Uno de los éxitos de la serie fue la introducción de la voz en off de ambos personajes que narran algunas escenas y el uso de las imágenes de archivo también se consideró un gran acierto. 

Los otros personajes secundarios, también merecen mención. Maurice Compte, el ficticio general Horacio Carrillo quien se inspiró en Hugo Martínez, un militar incorruptible que se dedicó en cuerpo y alma al servicio de la patria, Alberto Pacho Herrera, interpretó a un personaje carismático y aterrador y misterioso. Las primeras temporadas dejan escenas dramáticas, acción y ejecuciones brutales, con efectos especiales espectaculares.
En la tercera temporada, la acción se centra en el personaje Jorge Salcedo (Matías Varela). Este actor fue otro riesgo que asumió la productora, dado que es un personaje extranjero sueco de origen español, intentando adaptar el acento colombiano. En este caso los capítulos se desarrollan con el cartel de Cali que genera un giro importante en la forma en cómo se perciben los delincuentes. Se trata de un temperamento completamente distinto, una temperatura de los acontecimientos personajes muy diferentes. El jefe de seguridad, de la organización de Cali, es Salcedo, quien decide cambiar su estilo de vida y dejarlo todo. Sin embargo, el negocio de las drogas no se puede dejar, es como vender tu alma al diablo.

La serie es exquisita, pero, opinan muchos seguidores que romantizan y muestran una visión muy ingenua del país norteamericano, blanqueando la imagen de los agentes estadounidenses, como si las actividades de los de la DEA fueran intachables y que elaboran de forma independiente todo el mecanismo de la lucha contra el crimen organizado de las drogas.

Sin embargo, por primera vez, se presenta una serie que cuenta la historia de la guerra entre mafias de la droga y la sociedad colombiana de forma emotiva y convincente. Una serie apta para todos los mayores de edad que quieran conocer un poco más sobre la historia de uno de los países del mundo que más ha sufrido por culpa del narcotráfico, entre otras cosas.

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