¿Tienes ganas de ir con tus hijos al cine este verano? La nueva película de Santiago Segura, “A todo tren: destino Asturias“, es una apuesta segura; da lo que promete: buen rollo y sonrisas para toda la familia.
SINOPSIS: Cuando Ricardo, padre responsable volcado en su hijo, decide llevarle a un campamento en Asturias en tren nocturno, algunos padres proponen que sea él quien lleve a varios de sus hijos. Sin embargo, no cuentan que en el último minuto le acompañe Felipe, abuelo de dos de los niños, un tipo extravagante e irresponsable. Cuando el tren arrancha sin Ricardo ni Felipe pero con los niños solos dentro, comenzará una disparatada persecución por parte del padre y del abuelo para alcanzar al tren, y un alocado viaje por parte de los niños donde harán todas las travesuras que no se atrevían a hacer delante de los mayores.
Santiago Segura regresa a la fórmula que tantas alegrías le ha dado y nos presenta una comedia digna que no decepciona (si sabes a lo que vas, claro).
Por desgracia, en este país hay cierto morbo en triturar el cine de Santiago Segura y hay tantos prejuicios que da igual lo que haga, los críticos acuden predispuestos a fusilar sus películas mucho antes de verlas. Sin embargo, este rasgo dice más de ellos (los críticos que asisten a los pases de prensa con una plantilla de crítica negativa) que del verdadero talento del cineasta.
Es cierto que no hay grandes malabarismos en la puesta en escena, pero la dirección cumple con su cometido. Al igual que la interpretación de Santiago Segura, que hace lo que sabe hacer, ni más ni menos.
De hecho, a nivel interpretativo, quien se lleva el gato al agua es Leo Harlem. Abandona el tono estridente que suele otorgar a sus personajes y, aunque sus limitaciones son las que son, al menos está contenido, carismático y se ciñe a las exigencias del guion.
Respecto al resto del elenco, qué decir, lo que es de esperar en una película de Santiago Segura: muchos cameos y, entre los secundarios, destacar a Florentino Fernández, que encarna a un villano muy convincentemente; y a David Guapo, que está graciosísimo.
El guion encadena las peripecias una tras otra, como cualquier road movie, y tiene mucho ritmo. Es difícil aburrirse y no dejarse llevar por el magnetismo de los personajes. La estructura es mecánica, como también es normal en este tipo de cine, y eso hace que el espectador encuentre pocas sorpresas durante el visionado, pero la locura de las situaciones tiene un encanto que te hace decir, «qué a gusto estoy en esta aventura».
Es difícil reprocharle nada a la película. Obviamente no es el tipo de film que un adulto escoge cuando está solo, pero si una tarde de verano has de ir con la familia al cine, es la opción ideal. ‘A todo tren. Destino Asturias’ regala una hora y media divertida, sin exigencias ni aspiraciones. Divertida y punto.
Nota El Blog de Cine Español: 6
Una crítica de Toni Sánchez Bernal
