Ayer se presentó en Sitges la película “Baby”, de Juanma Bajo Ulloa (“La madre muerta”, “Airbag”), de la cual apenas he encontrado todavía críticas ni en la red ni en redes sociales. En su rueda de prensa en este certamen fantástico estuvieron su director. el productor ejecutivo Ferran Tomás y las actrices protagonistas, Natalia Tena y Mafalda Carbonell. “Baby” es un cuento negro, que fue apadrinado por Sitges dentro del proyecto Fantastic 7 en el Festival de Cannes,y nos cuenta la historia de una joven drogadicta incapaz de cuidar su bebé, por lo que decide venderlo a una mujer extraña pero pronto se arrepentirá de esta decisión. Según Bajo Ulloa esta película no tiene diálogos porque al tratarse de un cuento en todo momento ha buscado la esencia de la historia y ha puesto el peso de la historia en las miradas de los personajes, el vestuario, la ambientación, el sonido, y en la inteligencia del espectador para hacer su propia interpretación. En este nuevo trabajo, la escenografía y la ambientación tienen un papel fundamental: “La pretensión es que el relato sea un organismo vivo. La naturaleza, incluso en la degradación y la muerte, es bella”.
“Al igual que ocurre con la vida, la trama de BABY contiene simbolismos y metáforas, tal vez invisibles en ocasiones para el intelecto, pero perceptibles para el corazón o el espíritu. Alegorías que suscitan en el espectador sentimientos no racionales y estimulan una interpretación más profunda. No se emiten juicios ni valoraciones éticas, no hay moralina o paternalismo, los personajes actúan movidos por sus instintos, y es al ancestral instinto al que va dirigido este cuento de vida, lucha y muerte.”, concluye el director.
Sinceramente, desconozco si esta cinta ya tiene distribución en cines, lo que sí sabemos es que fue una de las películas seleccionadas por RTVE para comprar sus derechos televisivos. Si alguien la ha visto en Sitges que nos deje un comentario…
No decís nada de Dehesa.
Pude ver “Baby” en Sitges y, en general, no me ha convencido demasiado.
Tras el desastre de “Rey Gitano”, Bajo Ulloa regresa al tipo de cine de sus orígenes: un cuento de hadas para adultos. Me parece muy audaz la propuesta de ausencia de diálogos y, la verdad, esto no supone ningún problema. El problema de la película es la historia en sí: le falta contenido y caracterización. Ulloa dibuja cosas, pero profundiza poco y prefiere entretenerse en algunos malos tics de serie B, repitiendo acciones que tendrían más fácil solución (cuando tengáis ocasión de verla, ya lo entenderéis), y generando algún momento de vergüenza ajena. También abusa un poco del simbolismo, recreándose un poco en él.
La fotografía es bella y tiene algunos planos inspirados, la música -a veces muy grandilocuente- creo que es una firme candidata para el Goya y el universo que crea el vasco es atractivo, pero a veces se pasa un poco de kitsch, un poquitín indigesto.
Las actrices, en general, correctas, pero en algún momento caen en el histrionismo. Del reparto, me quedo con Rosie Day y la breve aparación de Charo López. Pero ninguna de ellas es potencial nominada.
La primera media hora es prometedora, pero luego se va perdiendo en cosas que tampoco aportan demasiado y descuidando el trasfondo de lo que podría ser una gran película. Para mí, se queda en tierra de nadie. Una pena muy grande, ya que tenía esperanzas en ella.
Puede que encuentre su público, pero en general creo que causará rechazo. Me da rabia por el potencial que tenía, pero es que hay algunos pasajes ridículos que me sacan totalmente del drama que cuenta.
La apruebo por la valentía, la solvencia técnica general, la idea y por el intento de volver a su mejor cine. Pero no le puedo dar más de un 5,5/10.
Ojalá alguien más que la haya visto pueda compartir otra visión.