El cineasta Achero Mañas tiene un gran talento como demostró con “El bola”, ópera prima con la que ganó el Goya, y con “Noviembre”, película que reivindico cada vez que puedo; mientras que con “Todo lo que tú quieras”, su tercer largometraje se alejó un poco de su mejor cine. Sin embargo, no ha tardado 10 años en dirigir una nueva película por esto sino, como explicó el propio Achero Mañas en rueda de prensa, prefiere no rodar una nueva película si no tiene el control total artístico de la misma. Otro tema es que sea un director complicado y le cueste encontrar socios para levantar sus películas, pero esa es parte de otra historia…
En fin, el tema es que se ha presentado “Un mundo normal”, su cuarto largometraje, en la sección oficial del Festival de Cine de Málaga, y, aunque no es un filme redondo, entretiene y emociona provocando las primeras lagrimillas en la platea de su Teatro Cervantes.
En “Un mundo normal” vemos como Ernesto Alterio, alter ego del propio Achero Mañas, es un director que no se encuentra en su mejor etapa profesional ni sentimental. Está en paro, se niega a trabajar en series, como el propio Achero, que ama al cine, y se acaba de separar, por lo que vuelve a vivir con su madre (Magüi Mira) la cual le obliga a prometerle que cuando fallezca no la enterrarán ni encinerarán porque ella desea que su cuerpo sea lanzado al mar. Por otro lado está su hija universitaria (Gala Amyach), vástaga en la vida real de Achero Mañas, que debuta en el cine con esta película y podría rascar nominación en los Goya en este año tan anodino, que ama a su padre pero que muchas veces le gustaría que fuese un progenitor normal. Pero, como le responde su padre, ¿quién es normal?
Cuando, para sorpresa de toda su familia, hermano incluido, interpretado por Pau Durá, se lleva el cuerpo inerte de su madre para cumplir su promesa, nadie le apoya. Ni siquiera su hija, pero decide acompañarle en este viaje para cuidar a su padre. Esta parte de la trama, una road movie en toda regla, servirá para que padre e hija se conozcan mejor y acabe convirtiéndose en un viaje de conocimiento, de liberación y de vida.
A “Un mundo normal” le sobran tantas sentencias y citas categóricas en su guion, muchas metidas con calzador, y algunas secuencias que aportan muy poco. También creo que el personaje de la ex mujer, interpretado por Ruth Díaz, es totalmente innecesario en la trama. Sin embargo, es una película más que digna con una trama tragicómica que creo gustará, sobre todo al target adulto.
Nota El Blog de Cine Español: 6.
