Seguimos con nuestras entrevistas durante este Estado de Alarma, que ya se está acabando, con una entrevista que le realizamos al actor Salva Reina gracias a sus trabajos en series como “Allí abajo” o “Malaka” y películas como “La isla mínima”, “Antes de la quema” y “Señor, dame paciencia”, entre otras.
Os dejamos con nuestra entrevista al actor Salva Reina:
– ¿Cómo está siendo el día a día en confinamiento de Salva Reina? Además, creo que la estás pasando en Madrid.
– Sí, estoy en Madrid. Vivo en el centro. Aquí al principio era “The Walking dead”, un silencio absoluto, era una sensación muy extraña porque estábamos acostumbrados al bullicio, al ruido de la gente. He intentando, a nivel personal, tomármelo con filosofía y, como bien sabes, por nuestro trabajo siempre estamos trabajando mucho, por lo que he aprovechado para disfrutar de mi casa, de mi pareja, que también es actriz (Mara Guil). Llevamos 8 años de relación y es la vez que más tiempo hemos pasado juntos. Llevamos ya casi tres meses encerrados y parece que esto funciona (risas). También he estado trabajando todo lo que he podido telemáticamente y consumiendo mucha cultura que creo que es lo que nos ha salvado a la mayoría en este confinamiento.
– Estudiaste Ciencias del Deporte y la Actividad física en Granada y llegaste a trabajar de profesor, ¿qué te llevó a abandonar la docencia por la interpretación?
– Sí, llegué a tener mi plaza fija para toda la vida. Mientras estudiaba lo compaginaba con la interpretación en teatro de calle. Desde pequeñito tenía claro que esto era lo que más me hacía feliz. Fueron creciendo las dos vertientes profesionales, la de la docencia, y de la interpretación, pero llegó un momento que fue imposible compaginar dar clases por la mañana e interpretar por la tarde. Cuando comencé a trabajar en la serie “SOS Adolescentes” en Canal 2 Andalucía rodábamos un día a la semana pero era por la mañana, decidí dar el salto, y no me arrepiento. Bueno, un poco en verano, cuando veo fotos de mis antiguos compañeros tomando algo, de viajes internacionales mientras yo estoy trabajando (risas).
– Todos pensamos que eres malagueño pero naciste en Las Palmas de Gran Canaria aunque con sólo 3 añitos llegaste a esta ciudad andaluza, ¿nos enseñas el DNI (risas)?
– Lo dejamos claro. Yo soy malagueño, mi familia es de Málaga, de un pueblo que se llama Pizarra. Me crié en el perchero, en una zona de Málaga que está entre la Estación y el Centro, y me siento malagueño. Pero, sí, nací en Canarias, mis padres estuvieron allí trabajando aproximadamente cinco años y medio, y nací allí. Estoy contento de haber nacido en Canarias, pero mi sentimiento es “malaguita”. Mi segundo equipo es Las Palmas, yo sigo al Málaga y a Las Palmas.
– Coméntanos en qué consiste “La cochera cabaret” que creaste ya hace unos en Málaga y cuándo volverá a abrir sus puertas.
– Ya llevamos ocho años. Es una sala cultural independiente en Málaga, en la zona oeste, en la zona más próxima a Torremolinos, por el Parque del Oeste, Paseo Marítimo Antonio Banderas, donde realizamos talleres, danza, teatro infantil, monólogos, circo, monólogos, exhibición de cortometrajes y largometrajes. Colaboramos con compañías locales, estamos abiertos a toda la riqueza cultural malagueña. También tenemos una pequeña zona de exposiciones. Al final es un sueño cumplido por mi parte, que siempre he querido tener un local de estas características. Málaga es una ciudad que apuesta por la cultura y ha crecido mucho en los últimos años turísticamente por esto pero adolecía de espacios de estas características, donde la comunidad artística malagueña pudiera exponer sus trabajos. Al principio fue muy costoso pero seguimos luchando ahora con el apoyo de los espectadores, tanto de Málaga, Andalucía, como de otras Comunidades que también vienen a vernos gracias a una programación que es muy interesante, incluso tenemos actividades, como conciertos, que sólo se pueden en Andalucía en nuestra sala. Desde que abrimos siempre tuvimos el proyecto de realizar un pequeño festival de cortometrajes y espero que pronto podamos llevarlo a cabo. Tenemos un equipo maravilloso. Somos tres socios, Javier Martínez, Mónica Cabrerizo y yo, pero todos los que trabajamos allí somos una gran familia. Y, principalmente, me encargo de la programación y de la dirección artística de la misma. Abrimos de nuevo el 2 de julio con un monólogo, llevo 17 años dedicándome a los monólogos y tengo una buena agenda de amigos que también trabajan este apartado, y, probablemente, aunque comercialmente no sea beneficioso, queríamos abrir lo antes posible, con todas las medidas sanitarias necesarias (separación entre butacas, gel hidroalcohólico, desinfección de la sala…), para volver a esa nueva normalidad lo antes posible.
– ¿Podemos decir que con la serie “SOS Estudiantes” te diste a conocer en Andalucía y con la serie “Allí abajo” en el resto del país?
– Aunque hubo otros trabajos anteriores, y todo suma, sí, mi primer trabajo de ficción fue en esta serie de Canal Sur y luego trabajar en una serie de tanto éxito, que se emitía en un canal nacional (Antena 3), me puso directamente en los hogares de millones de españoles por lo que para mí “Allí abajo” fue todo un espaldarazo a mi carrera.
– Debutaste en el cine con la producción andaluza independiente “321 días en Michigan”, cinta que se presentó en el Festival de Cine de Málaga, mientras que con “La isla mínima”, de Alberto Rodríguez, a pesar de contar con un pequeño papel, llegaste a millones de espectadores y también a que te conocieran muchos otros productores y directores.
– Sí, como te decía, todo suma, al final se trata de trabajar, de hacer todo lo que te llega, también colaboro en cortometrajes, porque nunca se sabe dónde puede ver tu trabajo un productor o un director. Además, mientras más trabajas, más aprendes y, a la vez, tienes más opciones de que tu trabajo llegue a otras personas que te pueden ofrecer más ofertas laborales.
– Hablando de “La isla mínima”, para mí, sin duda, una de las cinco mejores películas españolas del siglo XXI, ¿qué recuerdas de ese rodaje?, ¿ya te has recuperado de esa carrera perseguido por los personajes de Javier Gutiérrez y Raúl Arévalo?
– Como bien dices, se trata de uno de los peliculones del cine español y del cine europeo del siglo XXI. Estar ahí, casi empezando, que se fijaran en mí Eva y Yolanda para convencer a Alberto Rodríguez…Pasé muchos nervios, tenía muchas ganas de aprender, fue un conjunto de sensaciones inolvidable. Sin duda, estoy muy contento de haber podido formar parte del reparto de este excelente largometraje.
Sobre la carrera, comentar que tiene su historia porque el cervatillo que llevaba encima no era de atrezzo, era un cervatillo que había sido abatido y correr con ese animal en proceso de descongelación… No te quiero contar lo que me caía por la espalda. Recuerdo que desde vestuario, entre toma y toma, me indicaban si me quería quitar la camisa y les respondía que no. Y me preguntaban que por qué y mi respuesta era “porque lo que no quiero es ponérmela de nuevo” (risas). Fue duro pero es una de esas situaciones que nos regala esta profesión que te pone en situaciones que no esperas como ser perseguido por dos policías, que espero que no me pase nunca (risas). Además, debo destacar que a pesar de tener el cervatillo encima, era yo el que tenía que disminuir la velocidad para que Javier Gutiérrez y Raúl Arévalo me atraparan (risas).
– Andalucía se ha convertido en la última década, junto a Madrid y Barcelona, en un referente de la industria audiovisual, ¿cómo has vivido estos años la apuesta y el crecimiento del audiovisual en tu región?
– Con mucha ilusión. Como bien dices, ha habido un gran auge. Cada vez se rueda más, tanto proyectos internacionales como nacionales. Las autoridades competentes deberían darse cuenta que la industria audiovisual es un gran negocio, y que por cada euro que se invierte se consigue multiplicarlo por siete. Fíjate que con un pequeño proyecto hay 60 o 70 personas trabajando y que están comiendo, durmiendo y visitando tiendas y bares de la ciudad. Además, las obras audiovisuales son un gran escaparate publicitario para las zonas donde se graban. Por ejemplo, ya que hemos hablado de “La isla mínima”, recuerdo que se hicieron rutas para visitar alguno de los lugares donde se rodó como el plano de la persecución que hemos mencionado. La Junta de Andalucía también creó una aplicación donde se podían ver escenas que se han rodado en la región. Siempre digo que deberíamos ser el Hollywood Europeo por la luz, por la calidad de técnicos de todo tipo que tenemos, y por la riqueza de escenarios que podemos ofrecer con unas comunicaciones terrestres y aéreas formidables.
– Prueba de lo comentado anteriormente es que la serie “Allí abajo” se rodó en su mayoría en Sevilla y “Malaka” íntegramente en Málaga. Una suerte poder trabajar en casa, ¿no?
– Sí, poder rodar en tu tierra es un gustazo. Cualquier rincón es maravilloso desde Jaén hasta Huelva y creo que tenemos una tierra espectacular.
– Tras el éxito de la serie “Allí abajo” imagino que sólo te llegaban propuestas en comedias como “Villaviciosa de al lado”, “Señor, dame paciencia”, “El mejor verano de mi vida” o “Antes de la quema”, ¿qué te llevó a aceptar coprotagonizar la serie “Malaka” ofreciendo un registro totalmente nuevo en tu carrera? Y, ¿habrá segunda temporada de esta serie?
– La pregunta sería al revés, ¿cómo no aceptarlo? Era un proyecto tan maravilloso y un reto tan bonito con el que estuve involucrado con sus creadores desde casi al principio moviendo el proyecto. Creo que una de las grandes bazas del proyecto, entre otras muchas, es el guion que elaboraron, de la idea principal de los malagueños Daniel Corpas y Samuel Pinazo, un equipo de guionistas encabezados por Javier Olivares. No sé cómo tuvieron más nominaciones pero las críticas fueron muy buenas.
En principio todo indica que no. Ya ha pasado cierto tiempo pero nunca se sabe. Hay casos como “Vis a vis” y “La casa de papel” que no renovaron y cierto tiempo después, con su llegada a una plataforma, donde lograron nuevos espectadores, provocaron que tuvieran continuidad. Así pienso que si “Malaka” estuviera en una de estas plataformas y ganara nuevos visionados podría tener una nueva vida porque, pienso, que todavía hay mucho que contar en una o dos temporadas más. A mí me encantaría, pero no mucho más, no me gustan las series que se alargan demasiado. Me gustan las series que tienen un buen final. Malaka tiene un buen final y no os va a defraudar aunque quedan algunas cosas abiertas que se podrían retomar y ser bastante atractivas.
– Estoy cansando de explicar a mis amigos, que desconocen la industria audiovisual y la mayoría cree que vuestro gremio gana mucho dinero al veros en alfombras rojas con trajes de alta costura y joyas de mucho valor, que en esta profesión muy pocos consiguen vivir de trabajar de ello, ¿cómo se lo explicarías tú?
– Lo has explicado muy bien. Realmente hay una cara de la profesión donde hay una exposición de éxito pero es parte del show. Sin embargo, sinceramente, muchos actores llevan los trajes prestados y los tienen que devolver y si se ensucian mucho nos metemos en un lío (risas). Sólo un 8 % de los actores pueden dedicarse exclusivamente a este trabajo pero de este porcentaje la mayoría gana poco más de 1.000 y pico euros de promedio mensual. Los actores trabajamos en esto porque es lo que amamos, lo que nos llena. Hay que tener en cuenta que un actor está dado de alta en una película 15 días, y a lo mejor en ese año ya no trabaja más. Imagínate lo difícil que es tener un año cotizado en esta profesión. Nos falta posicionar la cultura como un bien de primera necesidad y durante este confinamiento se ha demostrado más que nunca lo necesaria que es.
– Documentándome para esta entrevista he visto que destacas que te quedas con el teatro, ¿por qué?
– Siempre digo lo mismo. Yo lo que quiero es trabajar, contar historias, darle vida, que es lo que nos llena pero, sí, el teatro es un salto al vacío en cada función, con un público diferente, con una energía diferente, cada función es completamente única. Lo que se produce entre el reparto y el público es mágico e irrepetible. Quizás por esto es por lo que me quedo con el teatro. El teatro es la base de todo y lo que más llena.
– Para terminar, dos preguntas más, ¿qué sueño te falta por cumplir tras conseguir vivir de lo que te gusta y de crear “La cochera cabaret”? Y, de todos los momentos que te ha regalado esta profesión, si sólo te pudieras quedar con uno, ¿con cuál te quedarías?
– No sé, no sabría decirte…qué me quede como estoy. Me siento muy afortunado, lo digo con el corazón en la mano, lo que quiero es seguir trabajando y seguir viviendo de esta profesión. Y también que La cochera siga abierta. Soy una persona que se conforma con muy poquito. Salgo barato (risas).
Tampoco sabría decirte. Conocer a mi actual pareja que también es actriz -esto nos lo dice con su pareja al lado fuera de cámara vía directo de Instagram-. He vivido pasos muy importantes como el que te llegue la serie “SOS”, que te llegue poder trabajar con Alberto Rodríguez. Todos son pasos muy importantes. No sé, me quedo con el próximo proyecto que me llegará que seguro que será maravilloso.
