La comedia “Perdiendo el este”, dirigida por Paco Caballero, cae un 59 % en su quinto fin de semana en cines y añade 104.000 € a un acumulado de 2,7 millones, por lo que terminará su vida comercial en salas rozando los 3 millones. Números por debajo de lo esperado pero se sitúa como la segunda producción más taquillera del año.
En el reparto de esta producción de Atresmedia repiten Carmen Machi, Julián López, Miki Esparbé, Younes Bachir y Malena Alterio, mientras las nuevas caras y personajes llegan con Leo Harlem, Chacha Huang, Silvia Alonso, Edu Soto, Marcos Zhang y Gorka Aguinagalde.
¿De qué va?
En Perdiendo el Este, con mil trescientos millones de habitantes, y a punto de convertirse en la primera potencia económica mundial, China ha traspasado el tópico de país exótico de cultura milenaria, donde se come arroz con palillos y las erres se pronuncian eles, para convertirse en un país moderno y pujante, una nueva tierra de oportunidades en la que todo es posible. Por eso miles de jóvenes, hijos de una vieja Europa cada vez más vieja, cargan sus ambiciones en sus maletas y cruzan nueve mil kilómetros de distancia dispuestos, como los pioneros, a conquistar el Lejano Este. Pero no es nada fácil triunfar en una tierra que tiene un idioma, una cultura y unas costumbres que están a un mundo de distancia. Y no sólo geográficamente.
En realidad, la primera debiera haber hecho estas cifras y por la tremenda vigencia del tema en aquel momento, no tanto por el resultado en pantalla.
Ésta puede felicitarse con lo conseguido, aunque hubiesen tenido más suerte otras en el trimestre y no estuviese segunda de la tabla.
Personalmente pienso que la primera película desarrollo un buen guion basándose en las dificultades actuales del país y mezclándolas con las viejas experiencias sufridas por nuestros abuelos cuando emigraron a Suiza o Alemania.La película nos muestra los problemas de los protagonistas desde un punto de vista divertido e incluso cómico,pero no dejan de ser “experiencias reales”.
Esta continuación carece de guion,si bien la idea principal que propone la película de trasladarnos a un escenario tan prometedor como China ,en seguida nos damos cuenta de que toda la trama principal se viene abajo por su inconsistencia,convirtiendo la película en una continuación de chistes y gracias logradas con mayor o menor acierto.
Me da mucha pena que una película,la cual la primera parte se desarrollarse tan bien,en ésta Segunda parte no haya sabido mantener el tipo.
Aún así me gustaría ver una tercera parte ,esta vez si rodada por el director de la primera,con guion que merezca la pena y poniendo un punto y final a la aventura iniciada por estos dos amigos.