El pasado fin de semana se vivió un hecho sin precedentes -al menos desde que existen registros al respecto- en las carteleras: 33 películas españolas fueron proyectadas en cines.
Esta cifra -la más alta nunca vista pese a un contexto de disminución de salas de cine- pone de manifiesto un problema recurrente año tras año. Tradicionalmente, las productoras-distribuidoras programan sus lanzamientos para el último cuatrimestre del año, período supuestamente de mayor consumo, próximo a la temporada festivalera (Donosti, Valladolid, Gijón y Sevilla) y, muy especialmente, de nominaciones a los premios nacionales (Goya, Feroz, Forqué…).
La consecuencia directa ante esta dudosa estretegia de distribución es un canibalismo-darwinismo entre películas de similar target, cuyo paso por carteleras resulta, a menudo, fantasma. Además, la cobertura periodística se ve obligada a marcar prioridades y son demasiadas las buenas películas omitidas y que mueren prematuramente.
Entre los fiascos más sonados, destacamos el resultado de dos de las películas más esperadas del año para público cinéfilo y favoritas de cara a premios: Petra (Jaime Rosales) y Quién te cantará (Carlos Vermut), ambas con pobres recaudaciones en torno a 150.000€.
Peor aún le ha ido a elogiadas cintas como Viaje al cuarto de una madre, Animales sin collar o Un día más con vida, que no llegarán a los 6 dígitos de recaudación.
Y especialmente doloroso es el caso de la película tal vez más aplaudida en Málaga: Sin fin, que cosechó unos raquíticos 6.770€ en su estreno en 22 cines (¿alguien sabe por qué han esperado 7 meses desde su premier?).
Tampoco convencen los €1,4 millones de taquilla de El Reino, la película mejor valorada por el público (7,6 de puntuación media en Filmaffiniy, la más alta de una peli española en años). Su cifra es similar a la de otra compañera de carteleras, La sombra de la ley, una de las producciones más ambiciosas del año y probablemente la más deficitaria.
La actual saturación de películas contrasta con otros periodos de absoluta sequía en carteleras. Por cierto, este viernes llegan 6 nuevas producciones españolas a los cines.
Películas españolas en cartelera el pasado fin de semana:
– Ana de día
– Animales sin collar
– Barbacana, la huella del lobo
– Bernarda
– Black is Beltza
– Campeones
– Carmen y Lola
– Comandante Adrián
– Desenterrando Sad Hill
– El amor y la muerte. Historia de Enrique Granados
– El ángel
– El árbol de la sangre
– El fotógrafo de Mauthausen
– El mayor regalo
– El mundo es suyo
– El reino
– El último fracaso
– I hate New York
– Las distancias
– La sombra de la ley
– Los Futbolísimos
– Miau
– Mudar la piel
– Ola de crímenes
– Oreina
– Petra
– Quién te cantará
– Sin fin
– Todos lo saben
– Tu hijo
– Un día más con vida
– Viaje al cuarto de una madre
– Yucatán
Y que lastima que algunas tengan tan raquítico números de copias en circulacion. Me muero por ver: Sin fin, Ana de dia, Petra, Un día más con vida…
¿Número total de salas frente a la competencia?
Mejor no saberlo…
Cada año pasa lo mismo y es un drama para el cine español, los principales motivos son cuatro:
– La política de plazos del ICAA. Te obligan a calificar, como máximo, a los 12 meses de acabar el rodaje y eso hace que muchas veces no puedas esperar a tener una ventana de estreno mejor. Si te vence en noviembre pues a estrenar en noviembre, cuando, si pudieras, seguramente esperarías a marzo, abril, mayo del año siguiente. Pero no puedes.
– Los incentivos fiscales en España, están muy mal pensados (de hecho, lo de las AIE’s está pensado para construir barcos) y en muchas ocasiones has de estrenar dentro del mismo año del rodaje.
– La concentración de festivales a finales de año (Donosti, Valladolid, Sevilla, Gijón..). Eso es difícilmente solucionable.
– La goyitis que padece el cine español, por desgracia las películas estrenadas hacia final del año, lo acostumbran a tener más fácil para que los académicos se acuerden de ellas. Si estrenas antes, la has de liar parda, estilo Estiu 1993, para que se acuerden de ti.
Coges estas cuatro cosas, las metes en la coctelera de la distribución y… boom, a estrenar todos el mismo al mismo tiempo y a suicidarnos todos juntos.
En manos del ICAA está solucionarlo.
Amén al comentario de Tono (¿Folguera?)
Lo explica muy bien Tono… con cambiar tres cosas, no se da esta situacion que a ojos del gran publico solo puede parecerabsurdamente ridiculo y dejar en aun más desprestigio a un sector siempre maltrecho…
Pero, para cambiar algo relacionado con el Estado en España, vamos… te da un cancer primero, fijo…
El Estado parece irreformable, todo, incluso con voluntad politica, se eterniza, cualquier nimiedad que hay que retocar…es alucinante….
…el Estado Español no se ha reformado desde 1978 más o menos… parches aqui y allá… cosas hechas a la fuerza de los acontecimientos – por ejemplo ahora los bancos van a pagar los gastos de la hipoteca etc, pero ahora, a fuerza de los hechos, no por inciativa de los partidos politicos …
Y como los pobres autonomos sabemos, solo este año la Seguridad Social se ha hecho online. ¿Es normal eso? Solo este año se puede gestiones online de la Seguridad Social, en la cuarta economia de la EU….Parece algo del Tercer Mundo la verdad. Es hallucinatory, colleague…
De ahi que el ICAA, que debería de ser una organizacion independiente financiado por el Estado pero sin formar parte del Estado, como es el Instituto Cervantes, no hará nada.
La inercia del Estado Español ha podido con todos que han pasado por aquellas puertas… y de aqui a un año estaremos diciendo la misma cosa otra vez…
Por curiosidad… entonces, Garci (y unos cuantos más) cuando estrenaban técnicamente para los Goya en agosto, y luego esperaban varios meses para estrenar comercialmente.. ¿cómo lo hacían?
Es más.. películas con la calificación ya expedida y con su certificado bajo el brazo del ICAA como “Yuli”, si entramos en su ficha nos indica que terminó rodaje en marzo de 2018.
Según Tono, podrían estrenar en Marzo de 2019. Pero estrenarán en diciembre.
Si miramos “Tu hijo”, vemos que finalizó rodaje el 4 de Abril de 2018. Ergo, según lo que aquí se dice, podrían haber estrenado hasta abril de 2019. Estrenaron el viernes pasado.
Otra de eOne: “Tiempo después”. Según el ICAA finalizó rodaje el 1 de diciembre de 2017. Por tanto, según este razonamiento, deberían estrenar como máximo el 1 de diciembre de 2018. Y sin embargo, lo harán el día 28, cuatro semanas fuera de plazo.
No acabo de creerme el razonamiento ese, aunque sí otros, como festivales y la vieja idea de que el otoño ofrece mejores fechas y cifras, por aquello de la reentree.
Muchas gracias Tono por la aclaración. A veces nos quejamos sin saber los entresijos reales de la industria y sus problemas. Pásate más por aquí y acláranos las cosas!!
Vaya, estoy mirando “La sombra de la ley”, y se terminó de rodar el 4 de septiembre de 2017. Se estrenó a mitad de octubre, mes y medio después de agotar el plazo que nos indica Tono.
Yo soy más de la opinión de que estrenan en estas fechas porque se mueren por una alfombra. Hay cosas que no se entienden, como que Petra no estrenara a la estela de Cannes. También Todos lo saben.
Luego, pelis como La sombra de la ley, que en otro periodo hubiese superado los 2 millones sin problema.
Alegría Tristeza será otra que pasará desapercibida. Una peli perfecta para ir a Malaga, ganar mejor actor y estrenar a continuación con resultado discreto pero no fantasma. Además, los Goya interpretativos se acuerdan de Málaga cada año.
Rigoberto, tienes razón, disculpa, he hecho una aproximación para hacerlo fácil y además me he confundido al escribir fin de rodaje, era inicio. Lo que exactamente dice la ley actual es que se ha de solicitar la calificación a los 18 meses del inicio del rodaje, hasta el año pasado eran 12 meses. Esta normativa es la que afecta a los estrenos actuales. Como mucho te podían conceder una prórroga de 6 meses. Con los 18 meses se ha arreglado bastante el tema y lo empezaremos a notar el año que viene o el otro
Te aseguro que los meses pasan volando, sobretodo en películas en las que el montaje es complejo.
Imagínate una película que rodaste en julio del 2016 y que tienes lista al copia para enseñar a festivales en marzo del 2017, ya no puedes espera a ir al festival de Málaga y estrenar en mayo del 2018. Tu límite estaría más o menos en enero del 2018. Y también están los límites de las ayudas autonómicas que va por años y a veces son hasta peor.
otro factor importante es el de los préstamos que has de pedir, TVE por ejemplo no te paga hasta, más o menos, unos 19 meses después del estreno. Eso significa que si retrasas el estreno, has de renegociar el préstamo y pagar un pastón de intereses que no tenías previsto, este es un quinto factor importante.
Oscar
Alegría, tristeza, seguramente es una película hecha vía incentivos fiscales y entonces ha de estrenar si o si este año.
Alegría, Tristeza es la primera producción Rakuten y, seguramente su explotación en cines es secundaria porque la idea es empezar a producir contenido propio.
Solo un apunte, no estamos en un contexto de disminución de salas sino que estas aumentan.
Es una pena porque estoy segura que con más espacio habrían funcionado bien si hubiesen dejado tiempo para ello.
Las pelis pequeñas debrían haber estrenado a lo Carmen y Lola poco a poco, haciendo buena promo para que luego el boca oreja hiciese el resto y fuesen aumentando las salas.
Lister, estoy de acuerdo en que el Estado siempre hace todo lo posible por no cambiar, pero tu solución al problema es que lo haga. Pues los tres cambios que consideras necesarios para que el problema mejore pasan por la Administración.
El sector ya debería contar con la incapacidad política que nuestras Administraciones demuestran década tras década para hacer esos cambios. Y debería haberse buscado sus propias fórmulas hace tiempo. No digo que sea fácil, pero esperar soluciones de los gobiernos, el central o los autonómicos, es un suicidio.
Y un apunte extra-cinematográfico ya que lo mencionas: los gastos de las hipotecas no los pagarán los bancos, no seas ingenuo, los bancos repercutirán ese gasto a los de siempre, ya deben estar trabajando en ello. Por cierto, esos “gastos” son un impuesto, y con esto volvemos al Estado (de la cuestión).
Kaurismatico, actualmente hay 500 salas menos que hace 10 años y estamos muy cerca del mínimo desde 2002:
http://www.cineytele.com/2018/05/28/estabilidad-en-el-numero-de-salas-de-cine-en-espana/
Marañon, Tono ha explicado, y muy bien, por qué siempre se dará este caso.
Muchos son estrenos “técnicos”, ojo. Son un como un primer pase más bien que un estreno real. Tono da en el clavo cuando señala que el estreno en salas es la condicion que activa toda una serie de cosas: plazos de contratos, licencias de distribución, pases en la tele, finaciacion etc. Es el sin que non de toda una serie de cosas…
Por otra parte, me da pena por los cineastas españoles, sobre todo los que trabajan en comedia, porque aqui la realidad hace una competencia que no veas.
Los jueces españoles son como los Monty Python. ¿Que guionista español está a la altura del Pleno del Supremo del otro día?
ALUCINANTE…
Lo que está claro es que todo el sistema del cine español al completo necesita una revisión total: no funciona en ninguna de sus vertientes.
Sí que ha aumentado el número de salas.
https://www.laopinioncoruna.es/sociedad/2018/06/05/numero-salas-cine-aumenta-espana/1298003.html
Hombre Kaurismatiko, que hayan aumentado las salas en 2017 respecto a 2016 (tras diez años de descensos) no quita que sigamos en números históricamente bajos de número de salas, y más aún de complejos y de butacas.
Por todo ello el volumen de películas es inasumible.
Que “las distancias” (una película pequeña y muy ingrata para el espectador) vaya a recaudar más que “quién te cantará” o “Petra” es digno de analizar. “Carmen y Lola” tardó demasiado en estrenar, pero aun así fue más inteligente, aunque creo que su hubiese coincidido con Cannes hubiese superado los 500.000€.
De acuerdo, Líster. Pero al final todo eso me suena a resignación, a “es lo que hay”. Y no debe ser tan inamovible cuando hay películas que se estrenan por otras fechas, y a veces con éxito. Esas ¿cómo lo hacen?
En todo caso, el principal problema, a mi juicio, antes de bajar a la letra pequeña, es el de “Los intereses creados” de Benavente (que de ayer es, por cierto).
Me explicaré: para que se introduzcan cambios, todos los implicados en llevar a cabo esas modificaciones (no sólo el sector del cine), tienen que percibir que ganan algo con ello, que LES INTERESA.
Y ahí topamos con un apriorismo que nunca se ataca, o se ataca poco mal: El cine es para las administraciones un gasto, no un beneficio (ni tan siquiera una inversión). Basta con ver el nivel de promoción que hace del cine en el que participa la tele que mas participa en nuestro cine, es decir, RTVE, que no deja de ser otra pata administrativa cuando se llega a las decisiones y los dineros. RTVE parece considerar el cine, a día de hoy, como una inversión “a fondo perdido”, en lugar de algo que debe tener retorno (no siempre, claro, la televisión pública tiene que apoyar también películas poco o nada rentables en sala, que de otro modo nunca se harían).
Mientras esa convicción de que el cine es una partida obligada de subvenciones y nada más no se revierta, y no se trabaje ante las administraciones para convencerlas de todo lo que arrastra de beneficio el cine (taquilla, impuestos, trabajo, contrataciones, imagen, etc.) las administraciones seguirán en la misma idea.
Y esa tarea no la harán ellas, tiene que hacerla el sector. A lo mejor lo está intentando, lo desconozco, pero si es así no está teniendo éxito.
La estrategia de cómo comunicar qué no depende de nadie más que del sector mismo. Tiene una oportunidad anual de oro para hacerlo, los Goya, pero prefiere usarla para otros mensajes. Creo que se equivoca.
Marañon:
Tienes razón, claro, para que haya un cambio profundo tiene que haber un quorum importante de cineastas descontentos con lo que hay ahora, y no sé si ese quorom exista. Más bien creo que no, nos habríamos dado cuenta.
Hay que recordar que para muchos, no sé cuantos, pero de uno de cada tres productores o mas tal vez, el cine es medio pasatiempo o hobby, y medio trabajo. Es gente de dinero, o mucho dinero incluso, y por tanto el cine para ellos no es un una profesion a secas. Si no se dedicasen al cine, no pasaría nada, no les supondría graves problemas, mientras si yo no trabajo en el cine, no sé que hacer…
Hablo de un 40% o un 50% de los productores – algunos tambien que son directores – y no lo digo con desprecio ni desdén, ojo, es perfectemante legítimo. Y siempre ha sido asi en los artes, siempre ha atraido a gente con mucho dinero, en el mundo editorial tambien. Y alli tienes – por lo que he leido – la pareja perfecta del mundo cultureta de España, que es Claudio Lopez DeMadrid, de Penguin Random House, y Angeles Gonzalez Sinde, ex Ministra cultura, de familia de cine, y directora además…
Pero a nuestros efectos, es decir para que suceda un cambio de politica de Estado radical – más aun, una transformacion, un planteamiento nuevo, un antes y despues – pues no ayuda para nada que el cine esté en manos de unos cuantos señoritos de Madrid y Barcelona y no sé donde más… Que más o menos es el caso. No van a hacer nada.
Más o menos, porque hay gente que no es su caso en el ajo…
Para mi, nunca hemos reemplazado a Fernando Trueba y a Pedro Almodovar, que son los que siempre han dado la cara por el cine español y ahora, como es normal, pues se van haciendo mayores y se han retirado un poco del foco de la atencion…
Ójala que haya gente joven que quiere cambiar las cosas….