El 66 Festival de cine de San Sebastián llega a su final. La edición que no será recordada como una de las de más calidad tuvo bastante repercusión en prensa con la llegada de muchas estrellas que tuvieran renombre suficiente para que viéramos su llegada en los telediarios. Se ve que Rebordinos sigue la estela iniciada por Venecia y que llevó al festival italiano a chulearse del mismísimo Cannes. El jurado, presidido por Alexander Payne, tuvo la tarea de anunciar sus elecciones y dejar sin premio a varias “darlings” de la crítica, con lo que supongo ocasionará el pertinente enfado por parte del gremio. Este fue su fallo:
Concha de Oro: “Entre dos aguas” de Isaki Lacuesta. 12 años después de presentar “La leyenda del tiempo”, retoma los personajes de los hermanos gitanos Isra y Cheíto para contarnos como es su relación entre ellos y con el mundo tras pasar por cárceles, paternidad y demás vicisitudes. Lacuesta consigue así su segunda Concha de Oro tras la que le dio Frances MacDormand en 2011 por “Los pasos dobles”.
Premio especial del Jurado: “Alpha, the right to kill” de Brillante Mendoza. El filipino se está convirtiendo en un fijo de los festivales más importantes en los que siempre pesca algún premio y manteniendo así vigente el crecimiento exponencial del cine filipino, aquí con los equipos antidroga polémicos por el uso de la violencia institucional impulsada por el presidente (demente) Dunterte.
Concha de plata a la mejor dirección: Benjamín Naishtat por “Rojo”. El thriller político sobre los inicios de la dictadura de Videla ha sido una de las ganadoras absolutas de la edición llegando a tres premios del jurado oficial. Naishtat evocó las dificultades que en la actual Argentina se tienen para hacer cine, con un Macri desatado en sus políticas neoliberales con resultados como la cancelación del Ministerio de Cultura y relegando al cine a su mínima expresión.
Concha de plata a mejor interpretación masculina Dario Grandinetti por “Rojo”. Su Claudio, ese abogado rural que se ve envuelto en una espiral de violencia que preconiza lo que está por llegar, sonaba desde que se pasó la película para el premio. Finalmente pocas serán las críticas para este reconocimiento. Su discurso resaltando lo peligroso del auge de la derecha en cuanto a volver a tiempos pasados que no son mejores.
Concha de plata a mejor interpretación femenina: Pia Tjelta por “Blind Spot” de la directora noruega Tuva Novotny, que en un único plano secuencia aborda las dificultades de una madre por entender a su hija adolescente agravada por una tragedia que asola a la familia. La interpretación, más espectacular que de creación, también supuso lo que mejores críticas cosechó de la película noruega.
Mejor guión: el único premio ex-aequo del jurado lo compartieron Paul Laverty por su guión para “Yuli” sobre el bailarín Carlos Acosta, que agradeció recordando que dos estados tan censurables como EEUU e Israel sean los abanderados del bloqueo cubano; y por otra parte Louis Garrel, que junto con Jean-Claude Carrière (¿hay algún guión francés que no escriba este hombre?) obtuvieron el premio por “L’homme fidèle” que tampoco pasó con mucha gloria por el certamen y que se puede dar con un canto en los dientes con este premio.
Mejor fotografía: “Rojo” de Pedro Sotero. Tercer premio para la película argentina, este vez para el brasileño Sotero que recordó que Lula sigue encarcelado injustamente por Tribunales corruptos brasileños. Poniendo la guinda a una gala de clausura eminentemente política.
Otros premios no oficiales hicieron que películas que partían como favoritas para esta noche no se fueran con bolsillos vacíos. “High life” de Claire Denis ganó a mejor película para la Fipresci.
“Quién te cantará” de Carlos Vermut conquistó a los votantes de los Premios Feroz otorgándole el Feroz Zinemaldia a mejor película de la sección oficial.
Sin embargo Sorogoyen con la recién estrenada “El Reino” si marchó sin nada que celebrar. Destacar los premios del público a “Another day of life”, la animación coproducida en España; y el Premio del Jurado joven a “Viaje al cuarto de una madre” de Celia Rico, de próximo estreno.
PAULO CAMPOS
No he estado pero pornlo leído bastante cuadro. Si el rumor que comentó Cedric Succivalli es cierto, Alexandre Payne se negó a premiar de ninguna manera High Life.
Payne es un rollazo y un director sobrevalorado.
En la gala dijo que esta película ganaba por unanimidad cosa que creo que es muy difícil de conseguir en un premio no? Me gustó su discurso y el de Isaki también así como el de Grandinetti que estuvo genial.
No sé lo que dijeron, yo estaba demasiado distraído con el vestido que lució la Verdú…mamma mia! La Concha para Lacuesta no me sorprende después de las críticas tan buenas que ha tenido, y conseguir unanimidad con un jurado tan dispar es una proeza (¡y una peli española!). Pienso ir a verla. El segundo puesto para Mendoza tampoco me sorprende, desde que lei las comparaciones con Tropa de elite pensé que se llevaría la Concha, y parece ser que la ha rozado con los dedos…
Es curioso que las dos películas españolas que generaban, a priori, más expectación ‘Quién te cantará’ y ‘El reino’ se hayan ido de vacío, pero sigan siendo las dos máximas favoritas a los Goya.
Después de Donosti, ‘Entre dos aguas’ ha ganado enteros, quizá se compense a Isaki por el casi desprecio a ‘La próxima piel’ en los Goya.
Hay que hacer ya una quiniela para los Goya, Redacción o Óscar TA.
Yo propongo:’El reino’, ‘Campeones’, ‘Todos lo saben’, ‘Quién te cantará’ y ‘Entre dos aguas’.
El director que se caerá, y no será nominado, al ser cuatro, me decanto por Lacuesta.
‘Petra’ es una de las que tengo más ganas, pero tb me tiene descolocado para los Goya.
Cercanos a la nominación….pero sin posibilidades: ‘Yuli’, ‘Carmen y Lola’, ‘Las distancias’, ‘Viaje al cuarto de una madre’, ‘La enfermedad del domingo’ y ‘La sombra de la ley’.
Todas ellas son las 12 películas que veo imprescindibles de este año.
Una buena cosecha, cómo hace dos años.
Me cuesta ver Entre dos Aguas en los Goya. Los Pasos Dobles no apareció, y también ganó la concha de oro. Puede ser está más accesible, imagino, pero no sé si para un premio de la industria.
El amor por Bollain es de larga tradición así que no la descartaría del todo.