Ayer fui a ver la película “Los futbolísimos” – la sala estaba llena de niños pequeños con sus padres – y la propuesta de Miguel Ángel Lamata (“Nuestros amantes”) me convenció a mí, adulto, y sobre todo a los peques de la sala que disfrutaron como enanos de las aventuras de “pakete” y sus amigos. Nada más empezar el metraje, con un original movimiento de cámara, Lamata nos presenta a los principales personajes de “Los futbolísimos” que vivirán una aventura llena de misterio, mucho fútbol, algo de romanticismo (con una escena con alto contenido simbólico sexual entre los personajes de William Miller y Norma Ruiz y un silbato dorado) y humor (quizás peque de tener pocas escenas humorísticas para animar en las butacas a los padres que acompañan a sus hijos al cine). Por otro lado, en algunas escenas se notan demasiado los añadidos digitales, como un ave que recibe un pelotazo mientras va volando por los aires, o ese balón en los partidos de fútbol que se nota demasiado que no es real. Sin embargo, fuera de todo esto, como he comenzando argumentando en esta crítica, “Los futbolísimos” entretiene, sobre todo a los pequeños, que vibran con varias secuencias de la historia (cómo ese emocionante penalti final).
En el reparto destacan los actores niños protagonistas los cuales están arropados por caras adultas muy conocidas para el gran público como las de Toni Acosta, Norma Ruiz, Joaquín Reyes y Antonio Pagudo, entre otros.
Si recauda más de 3 millones de euros en cines -lo tiene complicado, apunta a quedarse sobre los 2,4 millones – habrá segunda parte cinematográfica de las aventuras literarias de estos chicos -acaba de salir publicado el 14º libro-, cuyo autor, Roberto Santiago, tiene un pequeño papel en la película. Esperemos que haya segunda parte para que nuestro cine cuente con una nueva franquicia cinematográfica de éxito.
Nota El Blog de Cine Español: 6,5.
