Su resultado comercial no fue el esperado, por lo menos para los analistas de la taquilla, pero sus 3,6 millones de euros de taquilla deben de haber cumplidos las expectativas de sus productores, Atresmedia y Nostromo Pictures, porque el rodaje de su segunda parte, “Legado en los huesos“, adaptación al cine de la novela de Dolores Redondo, os informamos en exclusiva que empezará el próximo verano con el mismo equipo que la primera entrega: a la dirección Fernando González Molina (“Palmeras en la nieve”, “A 3 metros sobre el cielo”) y en reparto Marta Etura, Elvira Mínguez, Francesc Orella, Itziar Aizpuru, Carlos Librado, Miquel Fernández, Pedro Casablanc, Colin McFarlane y Benn Northover, entre otros.
También os confirmamos que muy malo debería ser el resultado comercial de “Legado de huesos” para que no se rodara la tercera y última parte de la trilogía del Baztán, “Ofrenda a la tormenta”, donde se desvelan todos los enigmas abiertos de este best-seller.
¿De qué irá?
El juicio contra el padrastro de la joven Johana Márquez está a punto de comenzar. A él asiste una embarazada Amaia Salazar, la inspectora de la Policía Foral que un año atrás había resuelto los crímenes del llamado basajaun, que sembraron de terror el valle del Baztán.
El título de la novela es “Legado en los huesos”.
Es la más compleja de las 3 novelas porque lo deja todo para la 3a en la que a mitad resuelve el enigma de la trama. A ver qué hace y cómo resumen porque me parece muy difícil!
La primera novela y su adaptación al cine no me parecieron lo que esperaba. Ambas se me quedan cortas.
Veremos ésta. La novela no la he leido ni creo que lo haga.
Pero me alegro de que estas jugadas funcionen por aquí.
Va a pasar demasiado tiempo entre el estreno de la primera y la segunda. Quizás lo lógico hubiera sido rodar las dos restantes a la vez para dejar cerrada la trilogía, y con material suficiente para desarrollar mejor los personajes (una de sus grandes carencias en la primera parte para mi ) quizás con una serie que se pudiera emitir luego en tv
Los únicos personajes con chicha son la hermana borde (especialmente por la intérprete) y la madre cabrona.
Los demás parecen estar ahí únicamente al servicio de que la trama avance.
Con la tía de la prota, la echadora de cartas, esto es imperdonable.
La otra hermana de la prota (¿o eran dos?), no tiene vida, y debiera.
Los compañeros policiales tampoco van más allá de ofrecer datos de la investigación. El policía ambiguo, de lo mejor desarrollado en la novela, en pantalla ni fú ni fá.
El marido norteamericano se limita a ser un buen tipo, en esbozo.
Y así un poco todo.
El Batzan y Elizondo, primorosamente fotografiados, desde luego.
Etura bien, pero su principal valor en pantalla es que, como personaje protagonista en el presente y en el pasado, se da por hecho que no necesita mucho dibujo. Error. Aunque ella cumpla, pero solo con lo que le dan.
A mí me parece que las películas podían subsanar estos agujeros noveleros sin demasiado problema. Recuerdo aquellos cineastas que le decían a un autor “dame tu peor relato y haré mi mejor película”. Adaptar, como el término indica, no es transcribir al lenguaje cinematográfico. Simplificas o amplías o cambias según convenga a la película.
Y si luego te sobra metraje, te cascas una versión en serie tv, con “material inédito” y bla bla.
Digo.
Yo también creo que una serie daba para indagar más en los personajes, pero igual es que el guión es flojo y no están bien construidos los personajes para cine. Se me escapó en el cine esta primera parte a ver si puedo rescatarla para ver la 2a. Y sí totalmente de acuerdo en lo de rodar del tirón las dos películas y dejar muchísimo material.