El pasado fin de semana en la gala de clausura del Festival de Cine de Zaragoza el joven cineasta Eduardo Casanova recibió el premio Augusto del Corto al Largo de este certamen.
Su papel de Fidel en la serie ‘Aída’ propició que Eduardo Casanova (Madrid, 1991) fuera un popular rostro televisivo en su pubertad. Antes, a los diez años, ya había empezado a escribir, señal de una inquietud precoz y expresión de una cinefilia que considera causa y solución de todos sus problemas.
A los 17 años debutó como director de cortometrajes con ‘Ansiedad’, rodaje en el que descubrió que solo quería escribir y dirigir. Después llegarían ‘Fumando espero’, ‘Amor de madre’, ‘La hora del baño’, ‘Eat my shit’, ‘Fidel’, ‘Jamás me echarás de ti’ y varios videoclips y trabajos publicitarios.
Con la sorprendente e incómoda ‘Pieles’, su primera película, ha refrendado que posee un universo conceptual y estético propio, cuestión que sumada a su prometedora trayectoria motiva que el Festival le otorgue el premio Augusto del corto al largo.
Últimamente, aparte de recorrerse media España presentando su primera película, también ha tenido tiempo para terminar el guión de “La piedad”, trabajo que será su segunda película y cuyo rodaje, seguramente, tendrá lugar el año próximo.