La primera selección de ayudas a producciones españolas de RTVE sigue generando polémicas porque si en principio se criticó que de las 12 películas aprobadas ninguna fuera un largometraje con una directora detrás de las cámaras, ahora es el joven director Oliver Laxe el que se queja de que otra vez se haya quedado fuera de estas ayudas cuando es el único director que con sus dos primeras películas ha sido seleccionado en Cannes y, encima, ganando premios (premio de la crítica en la Quincena de Realizadores de Cannes en 2010 por “Todos vós sodes capitáns” y el gran premio de la Semana de la Crítica en 2016 por “Mimosas”).
Como aparece en un artículo publicado en El País, Laxe se queja amargamente que lleva intentando hablar con los máximos representantes de RTVE para conocer las razones de por qué su tercera película, un largometraje que girará en torno a los incendios en Galicia, no ha entrado entre las primeras ayudas publicadas por este ente público. Oliver Laxe termina diciendo que puede rodar películas, muy baratas, gracias a que tiene muchos amigos en los que apoyarse, para terminar exclamando que luego la gente no se queje sobre que no ruede películas en España, o bien, que no sean producciones españolas, puesto que ya con “Mimosas” tuvo que recibir ayudas de Marruecos para poder cerrar su financiación.
Francamente, si han presentado el proyecto a tiempo y sin haber un error burocrático de su responsabilidad, me parece un auténtico escándalo que no le hayan concedido la ayuda.
Entre los agraciados se encuentra gente como Lamata por la secuela del horror de Nuestros Amantes…luego nos quejamos de que se van fuera.
Las ayudas de este año de RTVE son muy muy cuestionables. En algunos casos penosas y hasta sospechosas.
Pero de ahí que “la gente” se pregunte en un futuro porque no hace Oliver Laxe películas en España me parece un ejercicio de cierta soberbia por su parte. Y la carta me parece un poquito llorona. Es una putada, sí, pero hombre, de ahí a preguntar en El País qué hay de lo tuyo…
De hecho, la suerte, como él dice, es que él puede hacer sus pequeñas películas y la mala suerte es que otros cineastas (léase Urbizu) no pueden hacer sus medianas películas sin ningún tipo de ayuda.
Es una carta sincera y que refleja algo que lleva tiempo pasando.
David, te centras en lo mínimo, que si la “gente” y que si “un poco soberbia”. Incluso la calificas de llorona. Me parece que te equivocas del todo. No es una noticia para criticar a aquel, que hace publico un sentimiento, de una manera creo tremendamente respetuosa. Acaso crees que esto le beneficia con TVE, o ni que decir tiene con las otras cadenas? Tiene valor en escribir lo que escribe, pues de algun modo, se esta pegando un tiro en el pie.
Creo que sólo queda animar a Laxe, que ha hecho dos películas extraordinarias, a seguir adelante. Quizás lleguen mejores momentos, quizás no, en cuanta a la financiación.
La clave está en que tipo de cine quieren las instituciones publicas y que defienden. Si quieren cine más comercial, está bien, pero son validas las preguntas de si esas propuestas entonces deben ser las unicas. Más cuando, en este caso, es alguien de prestigio internacional. Y me parece que la relación con el eucalipto, y el huerto, tenía una parte cómica, y otra de metafora brillante.
Una cosa es que Laxe pueda aparentar soberbia en sus declaraciones, y otra es reconocer que estamos ante unas decisiones que tienen toda la pinta de escandalosas, que obedecen a unos elementos decisores que en el mejor de los casos adolecen de una total ignorancia y que en el peor se pasan el concepto de servicio público por el arco del triunfo.
Laxe podrá ir haciendo sus películas, sí, pero le costó un mundo levantar “Mimosas”, y en fin, me parece delirante que se abandone de esta manera a uno de los directores más interesantes del panorama nacional. No tener apoyos significa tardar mucho más en hacer películas, es decir hacer menos, hacerlas de condiciones más precarias, con menos potencial comercial y también de notoriedad artística.
¿Cómo queremos que seleccionen películas españolas a competición en Cannes con este percal?
Para empezar, el festival de Cannes me parece una vara de medir tan cuestionable como cualquier otra. Hay películas españolas que podrían haber estado y horrores orientales o americanos que podrían no estar. En Cannes se ven buenas, malas y regulares películas.
No significa nada y, de hecho, está más industrializado que los Óscars. Es marketing, una marca, un sello. Poco más.
Además, el cine español necesita, por un lado, taquilla y buenas películas. Vayan o no vayan a Cannes. Y este año, como el anterior y el anterior se han hecho muy buenas películas y han llegado bien a la taquilla.
El caso aislado de Laxe -que ha ido a Cannes, pues muy bien- no sirve para hacer una enmienda a la totalidad. Es una paletada.
De acuerdo en que es una vara de medir cuestionable, que está industrializado, y que se ve de todo, pero de las películas que trascienden al canon crítico internacional hay una proporción no especialmente pequeña que lleva el sello de Cannes.
En el fondo lo importante aquí es cómo se ignora a un director del talento de Laxe. Él tira del argumentario de Cannes porque es el mejor criterio objetivo que puede encontrar (no va a ponerse a glosar lo buenas que son sus propias películas). Y en fin, yo sí creo que es un fracaso de la política cinematográfica española que no haya ningún film de nuestro país en el mayor escaparate del mundo de cine de autor, de la cual es correponsable RTVE.
Yo sí creo que es un caso significativo de la política cinematográfica que se sigue en España. ¿Que se siguen haciendo buenas películas? Pues sí, y además dentro de la coyuntura reciente venimos de un año especialmente bueno (del que Laxe tiene su cuota de responsabilidad, por cierto), pero tampoco son tantas. En España no sobra talento en el ámbito del cine, y debería cuidarse mucho más.
Otro escandalo para Rtve http://www.formulatv.com/noticias/66622/grandes-perdidas-rtve-irregularidades-financiacion-cine-espanol/
Tienes razón, Genjuro, en todo lo que dices. Muy bien razonado, además.
Para simplificar, lo que no me gustaba de la carta era el halo algo victimista y algo pagado de si mismo y el uso de Cannes como baremo de la calidad de la película.
Pero sí, tienes razón. Y tienes razón en que la política estatal con el cine es lamentable.
Pues qué queréis q os diga, a mì lo de Cannes me parece decisivo. Dónde queda todo aquello de “marca España”, de llevar nuestra cultura por el mundo y demás?? En cualquier caso creo que falta por publicar una segunda tanda de películas.
El artículo citado de formulatv es, por cierto, bastante tendencioso. Señala solo los casos puntuales que le interesa para poder hacer el titular.
Una vergüenza.
La noticia esa de fórmula tv, más allá del fondo, que puede ser muy cuestionable, tiene una redacción amarillista y myy en la línea de, el cine español es una mierda y todas las películas se hacen conseubvenciones. Que un programador ponga biutiful en un horario de mierda, pued dar ese resultado. Si la pones a las 10 de la noche, anunciada toda una semana (Bardem, el director ganador de dos oscar, etc…), te aseguro que hace mejor audiencia que la media de la ruinosa tve.
Que no digo que no se hagan las cosas mal (a esta misma noticia en la que comentamos me remito, dar dinero a una secuela de una película que no interesó ni comercial ni críticamente a nadie, frente a un proyecto con el sello Cannes), pero esa nota tiene un aroma sensacionalista de primera.
Os recuerdo que el director de el ICAA antes fue director general del Consejo General de Deportes. Una trayectoria muy relacionada con el mundo del cine, claro.
Y el director de Rtve es ese que ha dicho que los españoles fuimos a evangelizar América. Otro personaje de gran nivel.
Consejo Superior de Deportes, quería decir
Estoy de acuerdo con Genjuro en que Cannes es un escaparate de primera, probablemente el que más. Que se pueda calificar como lo hace David de “marketing, una marca, un sello”, no le resta ni un ápice de relevancia, de hecho se la añade.
Si seguimos ignorando de qué va esto en el siglo XXI, de nada sirve que hablemos tanto aquí de copias, promedios, tops y demás cifras tremendamente vinculadas al marketing.
Siempre que se le quita importancia (sobre todo, si no nos escogen), a aquello que es relevante para cualquier industria cinematográfica competitiva, me acuerdo de lo que dijo Orson Welles de rodar en España su última obra maestra (Campanadas a medianoche): “era el único país que no se había enterado de que el blanco y negro estaba por entonces comercialmente muerto”. Ahí los cinéfilos salimos beneficiados, claro, pero creo que se entiende que ejemplifico otra cosa.
Para muchas bazas del negocio del cine (festivales en los que hay que estar, distribución sólida y no a remolque, educación audiovisual estudiantil, papel de la Academia y su Gala, políticas de Estado, etc.), seguimos bastante atrás. Así es imposible pasar del 20 de cuota, del 15 hasta hace nada.
Y aunque lleguemos un año más a los 100 millones de recaudación (cosa harto complicada), podremos estar encantados con nuestro ombligo, pero basta ver el tipo de película que gana cada vez más espacio en las recaudaciones nacionales y la irrelevancia internacional que suelen tener, para sacar algunas conclusiones poco optimistas.