Judith Colell y Jordi Cadena han dirigido “Elisa K.”, encargándose cada uno de ellos de uno de los dos fragmentos de este breve film (70 minutos). La película está basada en la novela de Lolita Bosch (Barcelona, 1970). La primera parte en blanco y negro es la de Cadena, que nos traslada a 14 años atrás, la segunda, en color, en la actualidad, y bastante más breve es obra de Judith Colell.
“Elisa K.” es la crónica de una violación y sus efectos en la memoria. La cinta se ve antigua, la primera parte es lenta, reiterativa y remite a varias décadas atrás visualmente. Es en esa parte donde veremos la peor escena de la película, bastante increíble y poco desarrollada, cuando Elisa es violada (¿cómo? se pregunta uno mientras permanece atento a la susodicha escena), en el salón en el que su padre está dormido casi al lado y su hermano juega en la terraza a escasos metros, no se explica el suceso, ni se matiza la acción, no hay gritos, ni nada por el estilo.
Resulta bastante cargante (y evita cualquier atisbo de sorpresa) que el narrador –voz en off- nos vaya explicando todo lo que veremos segundos después, es justo esta decisión narrativa la que no permite respirar a la historia. Es en el guión donde esta “Elisa K.” tiene su principal hándicap.
Hay un par de escenas interesantes, una en cada segmento, en la primera parte cuando el profesor decide aprobar a Elisa y el momento en que recuerda su violación en el tramo final.
Las dos actrices que interpretan a Elisa, a mi criterio, están bien, tanto Claudia Pons como Aina Clotet.
“Elisa K.” se rodó en Barcelona y en varias poblaciones del Vallés Occidental entre noviembre y diciembre de 2009, con producción del hospitalense Antonio Chavarrías (Oberón Cinematográfica). La distribución la realiza la empresa Wanda.
Puntuación de El Blog del Cine Español: 1,5
José López Pérez
