Este viernes 20 de mayo se estrenará en cines la película “El rey tuerto“, una producción de Moiré Films, Lastor Media y El Terrat, que cuenta con la colaboración de TVE y participación del ICEC, que destaca por ser la adaptación al cine de una conocida obra de teatro donde, curiosamente, repite el mismo equipo que en las tablas: su director y guionista, Marc Crehuet, y su reparto formado por Miki Esparbé, Alain Hernández, Betsy Túrnez y Ruth Llopis.
La obra de teatro “El rey tuerto (El rei borni)” se estrenó en febrero de 2013 en la sala Flyhard de Barcelona, un pequeño teatro entonces regentado por el dramaturgo y director Jordi Casanovas. Jordi, que era admirador de la serie “Pop ràpid”, de Marc Crehuet, le propuso a este que escribiese una pieza teatral de temática libre para su sala. Marc, que en aquél momento estaba acabando de dirigir la segunda temporada de la serie, aceptó enseguida, con ganas de cambiar de registro y formato.
Halló inspiración para la obra en una noticia que le inquietó: un chico italiano acababa de perder un
ojo en una manifestación por el impacto de una pelota de goma lanzada por un antidisturbios y, por lo
visto, no era la primera vez que sucedía algo así en Barcelona. Había otros casos, otras víctimas,
ciudadanos que habían perdido también su ojo por salir a la calle protestar. Crehuet se puso a escribir la obra sin renunciar al tono de comedia al que estaba acostumbrado.
El resultado fue una comedia negra, por momentos dramática que no sólo reflexionaba sobre el
incidente de la pelota de goma sino que iba mas allá, planteando toda una serie de preguntas acerca de
la crisis económica y los roles sociales de los individuos.
El director empezó los ensayos con algunos de los actores que le acompañaban desde hacía años en
sus proyectos televisivos: Alain Hernández, Miki Esparbé, Xesc Cabot, Betsy Túrnez y Ruth Llopis.
Lo que no esperaba ninguno de ellos es que mientras estaban en el proceso de ensayos, un nuevo caso relacionado con el tema saliese a la luz, armando un gran revuelo mediático y social. Se trataba
del caso de Esther Quintana, una mujer que perdió también un ojo por culpa de una pelota de goma
lanzada por un antidisturbios.
La obra se estrenó en febrero del 2013, cuando el caso de Esther estaba en pleno apogeo, obteniendo un éxito rotundo de público y crítica. Después de estar dos meses en la Sala Flyhard, se representó (también con gran éxito) en distintos teatros de Barcelona y Madrid como el Teatro Lara, la sala Mirador o la sala Barts.
Unos de los factores por los que El rey tuerto ha sido aplaudida de forma unánime es que el texto no
cae en el maniqueísmo. Esto es así hasta el punto que la obra gustó por igual tanto a víctimas de
las pelotas de goma que acudieron a verla como a algunos representantes del cuerpo policial. Traducida a cinco idiomas y a la espera de que se represente en otros países, la obra sigue todavía hoy girando por España.
