Como en años anteriores, os dejamos, a continuación, con nuestro artículo con lo mejor y lo peor de la 30º edición de los Premios Goya, presentada por segundo año consecutivo por el cómico Dani Rovira:
– Lo mejor:
- Empezamos con el momento más emotivo: el abrazo entre lágrimas entre el joven Miguel Herrán y Daniel Guzmán, al conocer el primero que había ganado el Goya a mejor actor novel.
- Seguimos con las emociones. Ver a Daniel Guzmán emocionado, entre lágrimas, recoger su Premio Goya a la mejor dirección por “A cambio de nada”, un sueño que le ha costado diez años levantar y que, espero, se reestrene en cines después de estos dos merecidos galardones.
- Sinceramente, ha sido una gran sorpresa, pero me lo esperaba tras ver cómo recogía el galardón a la mejor actriz en los Premios Forqué y en los Premios del Círculo de Escritores. Parecía que este premio sería para Inma Cuesta por su gran trabajo en “La novia”, de Paula Ortiz, pero se lo ha llevado la joven Natalia de Molina, y ya tiene dos, por su magistral interpretación en “Techo y comida”, de Juan Miguel del Castillo.
- Un emocionado Mariano Ozores, que llevó al público en masa a los cines, en las décadas de los 60, 70 y los 80, a ver muchas de las 96 películas que dirigió, el cual casi no pudo articular palabra en su momento homenaje que hizo levantarse hasta al propio Tim Robbins en el patio de butacas para aplaudirle.
– Lo peor:
- Seguimos con los números musicales: el del inicio de la gala sobraba completamente, más cuando han aparecido rostros conocidos de nuestro cine, no quiero dar nombres, que no se sabían ni la letra de la canción ni los pasos del baile. Un despropósito, otro año más.
- El fallo del sonido que nos dejó sin escuchar durante unos segundos a Dani Rovira en su monólogo inicial.
- ¿Qué hace Serrat cantando en esta gala y con una canción que sólo conocen los que tienen más de 40 años?
- ¿De verdad he visto bajar las escaleras del Teatro a 50 “tamborileros” machacando su instrumento musical en la Gala de los Goya? Me lo cuentan y no me lo creo. Homenaje a Berlanga, dicen…
- El descafeinado discurso de Antonio Resines, Presidente de la Academia de Cine Española.
- No me ha parecido del todo mal el recurso de cortar los agradecimientos de los ganadores, si éstos se pasaban del tiempo y más cuando muchos andaban perdidos y se repetían por culpa de los nervios, pero no se pueden cortar las palabras de la mejor actriz española del año. El final de sus agradecimientos, como ella misma declara en Twitter, iba a ser: “No me dejaron acabar y decir lo que quería decir, así que lo grito por aquí: ¡TECHO, COMIDA Y DIGNIDAD PARA TODOS!”
La gala de los Goya tuvo un 25.9% de share y fue vista por 3.949.000 espectadores, seguimos sin superar los 4 millones de espectadores, pero se mejoraron los datos del año pasado (3.839.000 telespectadores, un 24,7% de cuota de pantalla), por lo que la gala más vista por número de espectadores sigue siendo la del año 2010 que logró 4.656.000 espectadores, un 26,4% de cuota de pantalla.
Perdona, el homenaje era para Buñuel de su pueblo natal Calanda Por lo demás tienes razón, además creo que Ricardo Darin fue muy correcto en lo que dijo sin ofender. No entendí tantos premios a Truman.
Homenaje a Berlanga? …a Luis Buñuel.
El milagro de la diversidad de opiniones en este blog: yo lo de Molina lo pongo en el top de lo peor con diferencia ;))
La actuación de Serrat fue anticlimax total, sin sentido (como la de Poveda) y sin el menor sentido de espectáculo. Lo ideal hubiese sido que Alborán cantara su tema dado su enorme tirón, algo que además habría servido para promocionar la peli, que aún sigue en cartel.
Rovira estuvo magnífico, pero el guión fue muy flojo y demasiado extenso, se hizo francamente pesado.
Lo de cortar a los premiados fue absolutamente sublime… De nuevo tuvimos hasta 3 personas agradeciendo. Lo de cortar a la actriz prota fue de muy mal gusto, supongo que fue por una cuestión de equidad después de haber puteado a otras categorías, pero aquí no hay lugar para la justicia: hay categorías con más tirón que otras y punto.
Desde luego los premios a A cambio de nada fueron lo mas emocionante. Yo tambien destaco:
-Juliette Binoche, sobre todo, pero tambien Tim Robbins, Vargas Llosa, Carmena, Pablo Iglesias, Pedro Sanchez, Garzon… dieron cache y vidilla
-mi favorita Nadie quiere la noche , segunda pelicula mas premiada
-Dani Rovira
-el estilo de Belen Rueda, Marisa Paredes o Victoria Abril tambien dieron brillo
Y tambien cosas negativas. Como siempre lo peor los tuiteros de siempre queriendo demostrar su ingenio cuando lo unico que muestran son sus limitaciones y lo inutiles que son con sus gracietas propias de adolescente en edad del pavo (se incluyen presidentes de productores, periodistas, blogueros 24h especializados sobre todo en cine americano)…
Desde aqui mi enhorabuena al trabajo de La industria del cine y otros que quedan excluidos del parrafo anterior.
Lo mejor:
-Los premios de “A cambio de nada”. Prefería a Dolera como director, Herrán me parece bien premiado. Pero los dos ganadores fueron los momentos más emotivos de la noche.
-Mariano Ozores. Me temía un insufrible discurso interminable, pero al final fue un acto de humildad. Agradeció a sus actores y al público de forma honesta y sin ínfulas de grandeza. Además, el señor estaba muy emocionado, y fue su momento. Emma y Adriana supieron guiarlo y presentarlo correctamente.
-Dani Rovira. El guión era regular, pero Rovira lo elevó con su vis cómica.
-Los premios de “Truman”. Salvo director, que yo se lo daba a “La novia”, sus galardones fueron indiscutibles.
-Que O’Dogherty no saliera.
-Resines, pese a que su discurso fue justito justito, al menos le dió un poco de vidilla al tema. Aunque viniendo de González Macho, tampoco era difícil
Lo peor:
-Para ser una gala 30 aniversario, me faltaron retrospectivas: recopilaciones de ganadores más largas, más promoción, más reivindicaciones a figuras de nuestro cine… Hubo mucho más homenaje en el número musical del año pasado que en toda la gala de el presente.
-Serrat. No pintaba nada, la canción fue discretita y su puesta en escena fue muy sosa. Arritmia.
-¿Por qué no hacer, como en los Oscar, actuaciones musicales de las canciones nominadas? Forma de promoción, mayor visibilidad a una categoria denostada. Y Pablo Alborán habría dado más fuerza que Serrat, entre otros.
-¿Por qué traes a Salva Reina y le das un mero papel de relleno, en lugar de ofrecerle un breve monólogo?
-EL CORTE EN LOS AGRADECIMIENTOS. Vale que se tenga que sintetizar (cosa que ya de por si me parece discutible, los ganadores viven su momento), pero cortar de forma burda a De Molina, Guzmán, los directores de producción de Nadie quiere la noche fue feo feo. Dejaron a premiados sin hablar por ganar sólo unos pocos minutos. Creo que la gala no habría durado más de 10 minutos extras dejándolos explayarse debidamente. Que al menos este año no he visto muchos que se enrollen como una persiana (recordad que el año pasado vivimos esos 6-7 minutos de uno de los productores de la Isla Mínima hablando sólo, lentamente, a la 1:30 de la madrugada; estos eran en general más fluidos). En fin, cortes de mal gusto (ya lo dijo bien Darín). Si acaso, mejor introducir un breve sonido de advertencia para indicar que vayan acabando y así tengan tiempo de reacción para ir concluyendo decentemente sus parlamentos.
-Guión muy mejorable, con pocos momentos memorables.
-Los trucos de magia. Fueron momentos baratos dignos de “El Hormiguero”.
-El look de Victoria Abril y el peinado de Luisa Gavasa.
Carmena, Pablo Iglesias, Pedro Sánchez, Garzón dieron cache y vidilla???
No jodas, willie.
Un Nobel de Literatura sí. Pero estos no.
Y en cuanto al look de Victoria Abril, el vestido precioso, pero el peinado parecía el del actor secundario Bob.
Cuando dices que el que el micrófono se estropee sea lo peor, estás de puta coña.
Eso es impredecible. Lo solucionaron bien, y se siguió.
Y bueno… seamos francos, creo que ante todo los que están ahí son personas. Si te parece bien que corten los discursos (a mí también) bien. Pero que te parezca bien que los corten, salvo a la mejor actriz, es para quitarte automáticamente la redacción del blog. Por clasista.
Lo peor de la gala fue Rovira. Como monologuista es de lo mejor. Como presentador no tiene nada de gracia. Además, el lloriqueo de los del mundo de la cultura (esto pasa en cualquier ámbito) siempre quejándose de lo pobrecitos que son y de lo que hacen por la humanidad.
Lo mejor, sin ninguna duda, el homenaje a Mariano Ozores.
No obstante, es su gala. Que hagan lo que les salga del mismísimo. No somos quiénes para decirles qué han hecho bien y qué mal.
La verdad es que he estado desafortunado en lo de cache, pero vidilla si. La promocion de los premios es importante, que se hable de ella, que crezca su audiencia e interese al maximo publico. Y muy especialmente que los dirigentes o futuros dirigentes se sientan vinculados para mejorar las condiciones y apoyar al sector.
Y me encanta que Victoria Abril tenga las santas narices de salir con el peinado que le salga del chichi a sabiendas que al dia siguiente apareceran miles de majaderos acomplejados y represores poniendola a caldo. Pocas se atreven con la nueva dictadura del siglo XXI de las redes sociales, lo politicamente correcto, etc etc. Victoria, Rossy de Palma y poco mas. No me esperaba un comentario tan maruja de ti, Marañon, jeje, de ti precisamente no me lo esperaba
Algo que me gustó, o que han mejorado, fueron los vídeos de presentación de candidaturas , algo más cuidado que estos últimos 2 o 3 años y con primeros planos de los actores en las butacas.
Cayeron en el error del mezcladillo de cosas sin sentido, y Dani Rovira, sí tiene una cosa a su favor se come la cámara, no se ve nada forzado, no como Eva Hache o Manel Fuentes, en cambio el guion era flojo, solo brilló con chistes políticos, menos el momento ministro de cultura y Manuela Carmena, pero con los candidatos al gobierno estuvo gracioso pero Dani alargó la gala unos 15 minutos.
Y lo de Jorge Blass una tontería.
Si no te lo esperabas es que por lo general te agradan mis comentarios.
Me alegro.
Tengo la impresion que tienes una mentalidad muy abierta y estas por encima de muchas cosas, positivo y respetuoso. Vamos, el ultimo que imaginaba metiendose con la “transgresora” excentricidad de Victoria Abril anoche (que suele ser habitual en ella).
“Seguimos sin superar los 4.000.000 de espectadores” Un 25,8% de share!!! Es para flipar y estar dando saltos de alegría, una Gala de tres hora con esta audiencia, es algo para celebrar. Con la mitad de audiencia ya sería un éxito. Cuando pasan cosas buenas como estas, hagamos titulares destacándolo!!
Sólo por ver a Pablo Iglesias con esmoquin mereció pena todo el tinglao. Yo solo haré dos apuntes:
-Respecto a la gala pues bueno igual que siempre, momentos mejores y momentos peores. Pero con el tema de los discursos tienen que tomar decisiones y tajantes: o tiran de cronómetro o establecen unas normas previas o algo. Lo que no puede ser es que se tiren 20 minutos gimoteando, dudando, sacando dos folios de texto, agradeciendo a la abuela, la vecina del quinto, al del herbolario, etc…me parece un milagro el dato de audiencia dando por hecho que es una tortura china hasta para los cuatro gatos que seguimos el cine español.
-Respecto a los premiados, pues quedó claro que La Novia ha sido divisiva pero, por lo que se deduce por ejemplo de las palabras de Cesc Gay, es que en la industria se la tiene como la gran esperanza del cine español. O que se le debe algo a esta chica o no sé. Yo no he visto Truman pero a mí La Novia no me gustó nada, cero, y creo que de haber ganado estaríamos ante el peor Goya desde Camino, que se dice pronto.
La verdad es que hay cosas incomprensibles en la entrada. La cifra de audiencia no es buena, es extraordinaria (apenas 2.5 veces la media de la cadena, una cosita de nada. O sea, de ser la misma proporción en Tele 5 estaríamos hablando de un 32%, apenas los partidos de la selección).
La chapuza de los instrumentos de playback con Serrat es demencial, pero la canción no puede ser elegida con más tino “Los Fantasmas del Roxy”, una canción sobre un cine que se cierra.
Poner el tela de juicio los Tambores de Calanda y el homenaje a Buñuel con ello y, para colmo, identificarlo con Berlanga. En el Blog de Cine Español. No hay más preguntas.
Por lo demás, la gala como todas las galas. Un coñazo. Como los Oscar, los Globos de oro y hasta los Grammys. La naturaleza de una gala es ser un aburrimiento. Lo bueno (a mi modo de ver) es que este año se ha visto que hay margen para reducir (el número musical del principio pero, sobre todo, el inacabable monólogo inicial, el segundo fue más ligero). Si quitan 20 minutos estarían por debajo de las 3 horas lo cual yo creo que está más o menos bien.
Más que excentricidad -habitual en Victoria- lo que me ha parecido en este caso es un error estético evidente. Imagino que va en gustos.
Quiero repetir las palabras que ha escrito en su comentario Ralph Wiggum porque me parecen super-acertadas y estoy muy de acuerdo con él, no me gusta nada el cine de Mariano Ozores, pero su recogida del premio fue tremendamente emocionante, breve y muy, muy humilde. Sobre todo dedicándoselo al público que es para el que siempre ha trabajado:
“Mariano Ozores. Me temía un insufrible discurso interminable, pero al final fue un acto de humildad. Agradeció a sus actores y al público de forma honesta y sin ínfulas de grandeza. Además, el señor estaba muy emocionado, y fue su momento. Emma y Adriana supieron guiarlo y presentarlo correctamente.”
Lo mejor Daniel Guzman y sus premios.Emocionante.
Lo peor cono siempre el sinverguenza de Juan Diego Botto saludando a unos titiriteros que afortunadamente ya estan en la carcel.
Desacertados, por decirlo suavemente, los comentarios de Redacción sobre la improcedencia de la canción de Serrat y del homenaje a Buñuel con los tambores de Calanda. Los fantasmas del Roxy no solo lo conocen los mayores de 40. Por temática encajaba en la gala, aunque hubiera preferido usar las canciones nominadas. Lo de la tamborada de Calanda fue original, sorprendente, espectacular, emotivo, auténtico y pertinente. De lo mejor de la gala.
La presencia de Serrat fue un anticlímax absoluto. Un acústico soporífero y sin el menor sentido del espectáculo, propio de un escenario íntimo, pero en los Goya no.
A mí la tamborada no me desagradó.
En general este año han sabido dar difusión y lo de traer estrellas ha sido un gran acierto. El problema está en la gala en sí y su aroma rancio. Sólo hay que ver la escenografía cutre, el mago, los números musicales a lo José Luís Moreno; y eso no se solucionará hasta que jubilen a los organizadores: no saben hacer una gala amena. El año que organizó Alex de la Iglesia fue un abismo estético, ojalá vuelva.
Lo de cortar a los premiados fue un acierto y debió ser así desde el inicio. Los cortes fueron tras un tiempo más que razonable. Recuerdo al tipo que tras un buen rato de discurso, trabándose de lo lindo, saca un hoja inmensa y encima advierte “es larguísima”, y el tío no es capaz de arrancar a leer… Y todavía le quedaba por hablar a su acompañante argentina, vamos hombre! El error fue tratar de ser ecuánimes y cortar también a la ganadora a mejor actriz (cuyo discurso también se las traía)
La tamborrada era protagonista sobre el video con imágenes del cine de Buñuel. Error. Una vez que se ve que los tambores están allí realmente, las imágenes del cine de Buñuel debieron ser lo principal. A los tambores les hubiese bastado con recoger su llegada y un par de planos en los que se les viese tocar bajo la pantalla. Pero se llevaron todo el protagonismo. Incomprensible a mi parecer.
La gala se empeña en prescindir de los montajes de cine a toda pantalla, salvo para el Goya de honor (que además en esta ocasión como montaje no podía lucir gran cosa).
Es una mala decisión.
Serrat no pintaba nada allí, por mucho Roxy que le pongamos. El mago tampoco. Ambos son artistas de primera fila, pero la realización, el guión, el escenario,… todo iba en su contra.
De los números musicales de canta y baila ya no vamos a hablar, la perseverancia de la Academia en este error es de juzgado.
En cuanto a los que entregan los premios, me detendré en un simple detalle: en muchas ocasiones ni siquiera tienen claro dónde deben situarse cuando el premiado agradece, ni que deben hacer en ese tiempo. ¿Es que no hay ensayos?
En fin, un no acabar.
Me alegro de la alta audiencia, pero por eso mismo me parece otra ocasión tristemente perdida.
Lo mejor:
– Dani Rovira en su segunda parte del monólogo, la que refiere a los temas políticos.
– La presencia de las estrellas nacionale e internacionales.
– Los vídeos de los candidatos.
– Los discursos de agradecimiento de Miguel Herrán, Irene Escolar y Daniel Guzmán.
Lo peor:
– Casi todo lo demás.
– La tamborada atronadora de madrugada.
– El número musical inicial y la terrible canción original compuesta para la ocasión.
– El uso del playback en las actuaciones musicales.
– El desagravio a la gran derrotada de la noche: La novia.
– El guión.
– El escenario.
– Y peor de todo, la realización, incapaz de localizar a algunos de los mencionados o premiados. En algún momento, hasta Fernando Colomo, señalando a los cámaras quien era la persona a la que se estaban refiriendo y debían pinchar. Una barbaridad.
– El ritmo nulo de la gala.
– La música para cortar los eteeeeeeeeeernoszzzzzzzz agradecimientos. Era incómodo de ver.
– Que salgan dos o tres premiados por galardón y todos pretendan hablar sin tener claro lo que van a decir y con discursos escritos en interminables folios de interminables listas de nombres…
Me alegro por la audiencia conseguida.