Hoy, aunque un poco tarde, debido a mi “pereza” habitual y que llevo unos días “malito”, he sacado tiempo para trasladar a la pantalla de mi ordenador la entrevista que le realicé a la simpática Leticia Dolera en el Festival de Málaga, certamen donde presentó su Ópera Prima “Requisitos para ser una persona normal”.
Aquí descubriréis la “pesadilla” que le hicieron pasar a Manuel Burque para que engordara lo necesario para interpretar al personaje de Borja, presupuesto de la película, y la película española que nos recomienda a todos Leticia Dolera.
Os dejo con mi entrevista a Leticia Dolera por “Requisitos para ser una persona normal”:
– Para empezar, ¿cuéntanos de dónde surge la idea para esta historia?
– Pues, surge de la sensación que he sentido yo, al igual que seguro que muchas otras personas, de que no encajas y de que tienes que cambiar cosas de ti para encajar en la sociedad. Esto es lo que le ocurre a María de las Montañas, la protagonista de mi historia, que siente que no encaja, que no está a gusto y se propone ser normal para ser feliz. Así, elabora una serie de requisitos que debería de cumplir para ser una persona normal.
– ¿Estos requisitos tardaste mucho en elaborarlos o te vinieron pronto a tu mente?
– En realidad, yo creo que sólo tienes que mirar un anuncio de yogur, otro de coches y otro de cualquier gran producto, porque la sociedad, y la publicidad, te van mandado mensajes de lo tiene que ser normal, y aquello a lo que deberías aspirar como persona y tener éxito en la vida, que sería tener una casa grande, un coche de gama alta, tener una pareja que sea un pibón y que tenga un buen trabajo y tenga dinero pero, en realidad, todo esto no representa el éxito. El éxito en la vida es aceptarte como eres, aunque compartas piso con tu abuela.
– Coméntanos, también, ¿cuánto tiempo te costó levantar este proyecto?
– Soy muy mala calculando el tiempo, por lo que no soy muy fiable. Lo que más me costó fue el guión, al cual estuve dándole mucho tiempo vueltas. El guión es la clave de todo, es lo que vas a llevar a un despacho y tiene que ser algo que te apasione mucho para poder apasionar al de enfrente. Así, hasta que no tuve un guión que me creyera, no empecé a mover la peli. Además, tuve mucha suerte de que TVE confiase en mi proyecto, por lo que le estoy muy agradecida. Además, tanto Paco Plaza (El estómago de la vaca) como el resto de productores (“Corte y confección”) me han dado libertad total al creer en el proyecto, incluso más que yo misma al principio, ver que otra gente cree en ti, te da mucha fuerza. “Requisitos para ser una persona normal” es el primer largometraje que produce Paco y el presupuesto, ya que me lo preguntas, es de aproximadamente un millón de euros.
– Cuando estabas redactado el guión, ¿tenías en mente a los actores que interpretarían a tus personajes?
– No, a ninguno. Aunque sí me imaginaba a varias actrices de mi quinta, que me encantan, interpretando a María de las Montañas pero, cuando tuve el guión casi terminado y se lo enseñé a los productores, me dijeron: “Vale, tú serás María de las Montañas pero, ¿quién interpretará a Borja?”. Y yo, anonadada, les respondí: “Bueno, un momento, quién ha dicho que yo soy María de las Montañas”. Al final, después de darle muchas vueltas, acepté el doble reto de dirigir y protagonizar a la vez mi Ópera Prima. Sobre el personaje de Borja, debo confesar que lo escribí pensando en un Borja que existe de verdad, pero que a medida que yo iba escribiendo el guión, él iba perdiendo peso. Así, cuando terminé el guión, él había perdido 50 kilos y ya no cuadraba para interpretar este personaje. De este modo, abrimos casting, al que no se presentaron muchos, porque no hay muchos actores españoles con sobrepeso. Y yo conocía a Burque, porque habíamos trabajado juntos en una webserie, y como tuvimos mucha química le dije que se presentara al casting. La prueba salió fenomenal, pero el problema es que estaba delgado para el papel por lo que le comenté que tenía que engordar entre 15 y 20 kilos. Aceptó el resto, le pusimos una dietista, pasaba controles de sangre semanalmente para que su salud no corriera peligro. No engordó a base de comida basura, sino a base de comer mucho, sobre todo potajes. Como anécdota, os cuento que le trató la dietista que tan buen trabajo realizó con Antonio de la Torre en “Gordos”, de Daniel Sánchez Arévalo.
– Cambiando un poco de tema, cuando le comento a amigos míos que me gusta el cine y que voy a festivales de cortometrajes, me miran extrañados y me sueltan: “¿Un corto? ¿Eso qué es? ¿Para qué sirve? Ante esta tesitura, ¿tú qué responderías?
– Un corto no deja de ser un cuento y a todos nos ha gustado que nos cuenten cuentos. Es una forma de que te cuenten una historia sin que tengas que invertir mucho tiempo. Además, sirven de experiencia vital de cara a un largometraje a todos los cineastas.
– El año pasado el cine español logró una cuota de pantalla del 25%, ¿piensas que es algo esporádico o que ha llegado para quedarse?
– Ha llegado para quedarse (risas). El cine español siempre a lo largo de los años ha ido conectando y desconectando con su público. En el año de “El día de la bestia” se conectó muchísimo, luego con “REC, “El orfanato”, por lo que parece que en los últimos años la cosa ha sido más continua.
– Para terminar, ¿qué película española actual recomendarías a nuestros lectores?
– Pues, sin duda, “Negociador”, de Borja Cobeaga, porque creo que tiene un guión brillante y que consigue contarnos una historia de humor de un momento histórico muy duro.
Supongo que,tanto ella como Daniel Guzmán,no tardarán en ir preparando segunda película.