El próximo 30 de abril se estrenará en cines la película independiente ‘El hijo bastardo de Dios’, un thriller siniestro que retrata una enfermiza relación materno-filial. Terror psicológico, sangre y erotismo envuelven esta historia de un hombre capaz de todo por ser feliz.
Dirigida, escrita y producida Martín Garrido, ‘El hijo bastardo de Dios’ está protagonizada por Nando Torres, Beatriz Barón, Xisco Ródenas, Lola Paniza, Sabrina Olmo, Karina Amengual, Elisabet Garau y Miguel Pujadas.
El film tendrá una distribución limitada de Paycom Multimedia.
Andrés Sarmiento es un funcionario de Alaró, un pequeño pueblo del centro de Mallorca. Su discapacidad lo hace inclinarse mucho al andar con su muleta, por lo que se siente marginado e ignorado por sus compañeros de trabajo. Las circunstancias de su vida lo han convertido en un ser solitario e insensible. Para él la vida no tiene sentido. Además de eso, vive en un pequeño piso con su madre paralítica, una mujer de setenta años que ha hecho de la vida de su hijo un infierno. No ha dejado nunca de humillarlo, despreciarlo y de maltratarlo, pero Andrés le responde con frialdad. La lava, la viste y le da la comida como si de una muñeca se tratara, cosa que a la anciana la saca de quicio. Con este panorama, Andrés decide buscar la felicidad y urde un siniestro plan.
‘El hijo bastardo de Dios’ fue rodada en catalán y por ello quizá os chirríe el doblaje al castellano de su inquietante trailer, que nos deja intuir reminiscencias de ‘Psicosis’ y el cine de psicópatas. Aquí lo tenéis:
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=snEOKIZMWxQ[/youtube]
La saga de los Garrido, en este caso con el papá en lugar del hijo, que era quien daba batalla últimamente. Pues eso, cine de guerrilla… pero con poco talento.
El título se las trae, sobre todo porque crea confusión con la novela de Coll llevada al cine por Benito Rabal, “El hermano bastardo de Dios”.
Ele, Garridos!
el doblaje no hace ningun favor a esta pelicula, que, segun parece, solo va a interesar a los cuatro amigos del director
Le quitas el folleteo y la violencia explícita y podría pasar perfectamente como una película de relleno directa a alguna televisión autonómica.