Podría ser un guión de su nueva serie, “Aquí paz y después gloria”, porque después de repetir y repetir hace unos cuatros meses a la prensa que no quería ser Presidente de la Academia de Cine, un puesto que tuvo que aceptar forzado tras la dimisión de Enrique González Macho, esta tarde aparece publicado en los medios que Antonio Resines será el nuevo Presidente de la Academia al ser el único candidato en presentarse, con la directora Gracia Querejeta y el productor Edmon Roch en su equipo.
Desconocemos los motivos del porqué Piluca Baquero, única candidata que luchó en las anteriores elecciones contra González Macho, no se ha presentado (estamos esperando respuesta).
De este curioso modo, no hará falta que los académicos voten en las próximas elecciones del 9 de mayo al haber un único candidato, que ya se sabe ganador.
En un principio, no me convence Antonio Resines como Presidente de la Academia más que nada porque no tiene tiempo para atender las necesidades, modernas y tecnológicas, que necesita esta institución para ayudar a que el cine español cale entre los jóvenes.
Desde la creación de la Academia, el 12 de noviembre de 1985, los presidentes de esta institución han sido: José María González-Sinde (1986-1988), Fernando Trueba (1988), Antonio Giménez Rico (1988-1992), Fernando Rey (1992-1994), Gerardo Herrero (1994), José Luis Borau (1994-1998), Aitana Sánchez-Gijón (1998-2000), Marisa Paredes (2000-2003), Mercedes Sampietro (2003-2006), Ángeles González-Sinde (2006-2009), Eduardo Campoy (2009), Alex de la Iglesia, (2009-2011) y Enrique González Macho (2011-2015).
A su favor, los vices, Querejeta y Edmond Roch (productor de éxito)
Esperemos que esté asesorado.
Y bueno tal vez tenemos ciertos prejuicios por su perfil televisivo y su actitud entre pasota y criticona, y lo hace bien.
La Academia organiza los Goya y saca una revista. Más allá de eso sus funciones como institución son escasísimas. Creo que se sobrevalora una barbaridad quién la preside. No creo que Resines pueda cagarla mucho, por tanto. De hecho, al menos es un tío cercano al ciudadano medio, cosa que nunca le viene mal al cine español.
Lo que es importante de verdad es quién es Ministro de Cultura y, como mucho, quién es director del ICAA. Y como lobby, tiene mucha más importancia FAPAE y EGEDA que la Academia.
Rincewind, la Academia de Cine puede hacer muchas más cosas de las que nombras como, por ejemplo, organizar sesiones de cine español en los colegios, hablar con los políticos para promover nuestra industria, hablar con grandes empresas para encontrar patrocinadores, etc, etc…
En su sede también hay programación de pelis. Pero me parece una función sin repercusión importante, por eso no lo dije arriba. Que sí, se puede expandir y tal, pero nada cambiaría.
¿Hablar con los políticos? Lo hace, como digo, es un lobby más dentro de la industria y bastante menos poderoso que otros, como los que he nombrado. Y podría haber dicho otros lobbies más relevantes como UTECA, Fece, Fedicine, etc. Y da igual quién esté al frente, que esos otros lobbies van a seguir siendo más poderosos. Lo importante no es el portavoz, sino los intereses a los que responde.
¿Patrocinadores? Ya los busca para poder financiar los proyectos que lleva a cabo (sacar una revista mensual es muy complicado en los tiempos que corren y organizar una gala como los Goya también). Más allá de para eso…
En serio, su capacidad de maniobra es mínima. El poder está en el ICAA. ¿Sabes dónde está el poder en Francia? En el CNC, que es el ICAA francés. Ahí está la clave, no en su Academia.
La Academia es la.máxima representante del cine español. No sólo eso sino que también es la imagen de la industria y necesita urgentemente una renovación. La figura de Resines es caspa sobre caspa y sus acompañantes son más de los mismos.
¿Alguien sabe quién el presidente de la Academia en USA? No, ¿verdad? (y un americano tampoco te lo sabrá decir) ¿Por qué? Porque las Academias no tienen poder alguno. Si ni siquiera en la gran potencia mundial tiene relevancia ninguna, no digamos en industrias tan menores como la nuestra.
A lo mejor la Academia podía decirle a la Sexta, a Cuatro, a Telecinco, a Antena 3 y a las autonómicas que se puede programar en sus canales otro cine aparte del estadounidense.
Por decir algo.
Álex de la Iglesia es el perfil más adecuado creo yo.