Si de las películas en cartelera todavía no tenemos datos definitivos de cuánto han recaudado cada una, sí que tenemos datos oficiales de cómo le ha ido a “Magical Girl“, de Carlos Vermut, ganadora de la Concha de Oro en San Sebastián.
“Magical Girl” comenzó recaudando el lunes 8.723 euros, el martes subió a los 10.942 euros y el miércoles a los 11.766 euros. Sí, sé que no son grandes cifras, pero hay que tener en cuenta que en muchos de los 35 cines que se exhibe esta producción de Aquí y Allí Films sólo la programan en uno o dos pases y en sus salas más pequeñas.
Si “Magical Girl” recaudó 25.369 euros el pasado fin de semana, durante la fiesta del cine ha conseguido 31.431 euros.
Donde mejor está funcionando esta película es en los cines madrileños , representando más de un 20% de su taquilla en cines.
Este film, uno de los favoritos para los próximos Goya, acumula ya más de 100.000 euros de recaudación en salas, a la espera de seguir logrando buenos mantenimientos durante las próximas semanas gracias a su excelente boca a boca.
A ver si al menos recupera la inversión con la taquilla española y va rascando beneficios a base de ventas internacionales y su explotación en otras ventanas.
Con los derechos de emisión de RTVE ya la habrá recuperado.
El miércoles 29 de octubre fui a ver Magical Girl a la sesión de las 20.30h. Salí fascinado. Más tarde, ya no lo estaba tanto. ¿Por qué cambió mi opinión? Creo que a la película le sobra “media hora”. Explica la historia de cuatro personajes, de los cuales tan solo dos avanzan hasta el final. Los otros dos (niña leucemia + padre) quedan a expensas de los otros dos. Falta aclarar la escaleta. La presentación “niña leucemia + padre” promete durante todo el primer acto, pero se diluye como un azucarillo durante todo el segundo acto y parte del tercero a la espera de la visita final de José Sacristán. Se convierten en personajes pasivos, con lo que prometían. Por tanto, ¿por qué no plantea desde el principio tan solo la historia de los personajes “chica loca + profesor” e introduce “niña leucemia + padre” al final del primer acto y arranca el segundo? Quitas metraje, tiempo, ganas en velocidad narrativa. Y quizás al director se le ocurra para el “padre” algo más que “vete a la biblioteca y pon en la Constitución la pasta.” Por otro lado, no necesitamos veinte minutos para presentar bloque “niña leucemia + padre”: lamentablemente problema “niña leucemia + padre” se entiende en una secuencia. Innecesario momento radio esperando padre escuche dedicatoria y demás escenas que dan información que luego no se usa (ajustando el presupuesto para material de construcción para posteriormente acumularlo en un almacén…) Si bien los personajes secundarios que satelizan el bloque “chica loca + profesor” (menos el marido) hacen crecer la historia enormemente, los personajes que satelizan el bloque “niña leucemia + padre” no llevan a ningún lado: ni las amigas de las que habla “niña leucemia”, ni la supuesta amiga del “padre” que regenta un bar y a la que acude a pedirle ayuda económica. Esta última no tan solo no lleva a nada en la historia (y prometía), sino que el “padre” cambia de bar perdiendo una interlocutora, alguien que explique al personaje del “padre”. Pregunta: ¿dónde está la madre de “niña leucemia”? Mejor anularla, justificando que “padre” cumpla deseo de “niña leucemia”, pues un tercero en ese hogar creo que frenaría propósito y acabaría película en 7minutos. Además, creo “niña leucemia” es demasiado mayor para la situación, pues a esa edad ya se daría cuenta de la salvajada económica que “padre” está cometiendo. Tiene once o doce años, sí, pero no por eso son tontitas (¿si fuera un niño lo haría tan pasivo?). Con siete años la historia se explicaría igual. El encuentro casual entre “padre” y “chica loca” demasiado casual. Demasiado… Y, ¿de verdad “padre” creía que lograría su propósito con esa piedra?”. Me parece ingenuo ese momento, punto de arranque de toda la película. Estereotipos: de todas las cosas que pueden pasarle a una niña, leucemia; de todas las cosas que le pueden pasar a una chica joven, loca; de todas las maneras que puede conseguir chica loca algo, como no prostitución, y si puede ser maso (momento Las edades de Lulú pero sin mostrar nada para hacerlo psicológico); de todos los maridos, como no dominador; el iluso perdedor, de letras; el frío y calculador, de ciencias; en la casa de la sierra, bikinis y viejos; y el momento estrella del estereotipo: “chica loca” está loca por su escaso interés maternal (momento bebé en brazos), una línea argumental lamentablemente muy extendida desde hace algunos años. Ejemplo: en misma escena en película años 80 se tomaría un gintonic, no una pastilla azul (son los tiempos que corren). ¿Por qué desaparece también el “marido”? ¿A dónde va? ¿A la sala 2 de la película de al lado con la madre “niña leucemia”? Personaje “marido” justifica acciones “chica loca”, pues hay que construir al personaje para un largometraje, no para un corto. La mejor escena la del bar: por primera vez el director se atreve a poner en un mismo espacio a cuatro personajes. Pero tampoco acaba de mover bien a los dos únicos que hacen algo en el escenario. Final: poético. ¡Alto! Pero luego, pensando… Espero que nadie se enoje. Un abrazo.
Espectador, interesante opinión la tuya. Algunas de las cosas que dices tienen mucho sentido, pero no estoy demasiado de acuerdo con muchas otras. Especialmente lo del número de personajes.
Quizás el padre y la niña tienen una presencia pequeña, pero es jugosa y tiene la suficiente entidad como para que a mí no me sobre. La niña además juega un papel muy grande en cuanto a las expectativas del espectador. El personaje del marido sí me parece más cuestionable.
La película es circular, y crea una cadena de personajes que actúa de manera retorcida ante un deseo justificable pero probablemente innecesario. Cada acto tiene unas consecuencias en otros personajes, pero que son ignoradas por quienes los provocan. Me parece una dinámica básica en la construcción de la película, que yo entiendo como alegoría de nuestra sociedad. Para ello no basta con dos personajes.
espectador, no comparto tus apreciaciones (si despues tengo tiempo te lo elaboraré). Pero es un gusto leerte
Me encantó la peli. No es fácil ni apta para todos los públicos. Me recordó a La soledad, de Rosales, en el ritmo y el lenguaje. De hecho, a veces me imaginaba cómo hubiera quedado el recurso de la polivisión en algunas secuencias. Interpretaciones mayúsculas de Lennie y Sacristán. La camarera amiga del padre da para más, estoy de acuerdo. Y la niña tenía edad para saber lo que cuestan las cosas y extrañarse al recibir el regalo. Muy potente el contraste de las imágenes hermosas de la dehesa con el infierno que se esconde en ellas…
Bueno, a tenor de lo que dice el titular…. todas las películas de la cartelera (con alguna excepción) han conseguido más espectadores durante la fiesta del cine que durante el fin de semana previo. No veo donde está el logro.