La película “La venta del paraíso“, de Emilio Ruiz Barrachina, que se estrenó el pasado viernes 21 de abril con 13 copias, sólo logró recaudar 2.039 euros, es decir, una media por copia de 157 euros.
Según sus productores, “La venta del paraíso” contó con un presupuesto de 2,7 millones de euros por lo que me gustaría que nos explicasen a los usuarios de este blog cómo piensan recuperar su inversión lanzando su película con 13 copias y sin ninguna publicidad.
“La venta del paraíso” es un nuevo ejemplo de tanto cine español que se ha estrenado en las últimas décadas de forma invisible porque, supuestamente, sus productores con las subvenciones y las ventas a las televisiones ya tenían más que amortizadas sus producciones.
¿Cuándo dejarán de producirse estos casos que tanto daño hacen al cine español?
Hombre, en estos casos se suelen inflar los presupuestos para obtener más subvención y no palmar dinero pase lo que pase, así que me imagino que lo de 2,7 millones será una fantasmada.
Igual que veo una vergüenza que se eliminen las subvenciones para el cine, también veo una vergüenza que haya gente que estafe al Estado (o sea, a todos) con este tipo de películas. Pero bueno, para muchos vale el dicho de muerto el perro se acabó la rabia.
Bueno, en este caso la productora me toca algo de cerca y sé un poco del proyecto (no he visto la película): no es que sus productores quieran estafar al Estado, es que sencillamente han hecho la película que querían hacer aún a sabiendas de que el proyecto tendría un lanzamiento limitado. Es decir, tienes un proyecto que sabes (o sospechas) que no va a atraer a mucho público y que no va a interesar a las distribuidoras como para apostar fuerte por él, pero tú quieres contar esa historia. Entoces hay dos opciones: o abandonas el proyecto por otro un poco más comercial o te lanzas a la piscina, haces la película que tú querías y esperas recuperar la inversión con subvenciones, ventas a televisión y extranjero, etc. Obviamente, han tirado por esta última opción. No estoy defendiendo la película en sí, insisto qu no la he visto, sólo estoy descubriendo cómo se gestan este tipo de proyectos. Tampoco creo que con más copias y publicidad ‘La venta del paraiso’ hubiero mucho mas taquilla. No como para recuperar esos 2,7 millones.
Gracias por explicarlo. Pero no se podía haber hecho el mismo proyecto con un presupuesto un poco más ajustado? Ojala que con ventas a tv y al extranjero recupere su inversión, pero parece complicado.
Raúl, en ningún momento digo que la película sea mala, todavía no la he visto, si no que me parece extraño que unos productores inviertan en una película 2,7 millones de euros para luego estrenarla con 13 copias y sin publicidad.
Realmente lo que me provoca desagrado, es un típica problemática que se ha dado en el cine español tanto como el cine latinoamericano.
La película tuve la oportunidad de verla en el estreno en el Festival de Cine de Morelia. La película contó sólo con dos presentaciones, una en el cine del centro de Morelia, la otra en la Plaza las Américas. Quitando a la gente del alta importancia en la sala, el público era escaso, por eso la película es, como se menciona aquí, invisible al carecer de publicidad. Pero lo más importante es que esta película es más que sobresaliente, trasciende en todo esquema en el que el cine español se ha encasillado. La película merece más que 13 copias, merece un reconocimiento que el cine no ha perdido su estructura madre, la sorpresa, y el asombro. Un culto a Buñuel, se podría decir; sabrosa en historia y fructífera en drama. Divertida sólo como la ironía puede hacerlo. Espero no se quede como una película invisible,
Creo que las películas pequeñas deben seguir haciéndose, si bien me parece preocupante que los productores de este tipo de cintas no busquen publicidad o repercusión ni siquiera a nivel de festivales. Por otro lado, no sabemos si el hecho de que haya salido con tan pocas copias es “culpa” de la productora o de que no han encontrado distribuidora, o no han encontrado fecha a causa de esos estrenos americanos con miles de pantallas ocupadas. Haría falta más información para opinar sobre este caso concreto.