Muchos críticos situaron la Ópera Prima de Carlos Vermut, “Diamond Flash” (podéis consultar nuestra crítica aquí), entre las mejores películas españolas del año 2012, por lo que su segundo film, “Magical Girl“, cuyo rodaje comenzará este verano, también la pasamos a añadir a nuestra lista de las películas españolas más esperadas del 2014.
“Magical Girl” contará con un presupuesto de medio millón de euros y está previsto que esté terminada para finales de año o primeros del año 2014 para comenzar su recorrido por diferentes festivales, tanto nacionales como internacionales.
En el reparto de “Magical Girl” destacan José Sacristán, Bárbara Lennie y Luis Bermejo.
Pedro Hernández, de la productora Aquí y allí, comenta sobre este film: “Será una película muy Carlos Vermut, con personajes cercanos: un padre y una hija españoles supercastizos que, sin ninguna intención más que resolver sus problemas se van metiendo en unos jaleos tremendos. Es una mezcla de thriller, drama y comedia con situaciones irreales. Yo siempre le digo a Carlos que este va a ser el Pulp Fiction español, aunque él me dice que no tiene nada que ver. Cada vez la vemos más como Fargo.”
Referencia para ubicar la peli: Pulp Fiction, Fargo,…
Así se hace marca en España, del cine ajeno.
Bárbara Lennie :):):):)
Lo que haga Carlos Vermut pasa a ser para mi una cita ineludible, espero q se estrene en salas.
A mi cualquier pelicula donde contraten a Barbara Lennie me va a parecer bien xdd
me gusta que prefieran invertir en talento que no invertir en una actriz que se supone que llama mas la atencion a los medios pero que no sabe hacer nada.
Di que sí, Marañón, que seguimos con la tontería esa de que el cine español es un género. No solamente hay que conseguir puntuar alto en el carné de españolidad sino que además no se pueden tener referentes extranjeros. Tenemos que aislarnos y tampoco podemos ver ni estar influidos por cosas que no sean las pelis cañís. Es una traición a la patria. Y porque el productor dice que los dos protas son muy castizos, que si no, vamos, habría que fusilarlos ya directamente. Viva el provincianismo apañó.
Rincewind, hombre, qué manera la tuya de interpretar mi comentario.
No es una cuestión de españolidad, de aislamiento, ni de fusilamientos por traición a la patria, sino pura y simple torpeza comercial continuada.
Además de un hecho permanentemente visible: la industria se queja mucho de la competencia desleal del cine de Hollywood, cuando en realidad es la primera que le da espacio, tiempo y hasta munición. Que parecen programadores de TVE, joder (joder en plan castizo o en plan tarantiniano, eso a tu gusto).
Te voy a poner un ejemplo diáfano:
http://fernandomaranon.blogspot.com.es/2011/10/no-tenemos-mitos.html
Pero eso que comentas no tiene mucho que ver. Que Tarantino y los hermanos Coen sean influyentes mundialmente, no implica pérdida de personalidad. ¿Acaso te crees que los grandes pintores y escritores de siglos pasados no creaban tendencias fuera de sus países? Gente de la generación de Vermut ha estado marcada por claves y estilos como los de esas pelis. Igual que Iñárritu y Arriaga hicieron ‘Amores Perros’ con influencia de Tarantino y les salió una película personal y muy mexicana. Esto es normal y es sano. Lo cual no quita para que sepamos y debamos cuidar y promocionar nuestro patrimonio. Pero creo que es algo que es aparte de esta cuestión.
Te voy a poner otro ejemplo:
”PLÁCIDO”
(Articulo publicado por David Trueba en 1997, para el dominical del diario El Mundo).
Esta semana se cumplen treinta y cinco años del estreno mundial de Plácido, la película de Berlanga. Motivo por el cual las más prestigiosas universidades norteamericanas se han volcado en un ciclo de homenajes sobre la obra de este cineasta y no son pocas las tesis que se están llevando a cabo en torno a este clásico del cine español. Una copia restaurada de la película, que reintegra fragmentos cercenados por la censura, ha sido lanzada en los mejores cines de Estados Unidos y se espera que su recaudación quintuplique la que logró en su día. La distribución corre a cargo del lobby formado por los grandes estudios de Hollywood, unidos por el amor que profesan al cine europeo y capitaneados por su magnánimo capo Jack Valenti.
Es tal la placidomanía que se vive en los USA que han salido a la venta muñecos que reproducen las figuras de Cassen, Elvira Quintillá y José Luis López Vázquez. El personaje de este último, “Quintanilla, el hijo de Quintanilla el de la Serrería” es el de mayor tirón popular entre los niños norteamericanos para quienes se ha convertido en alguien tan mítico como Batman o E.T. Sus relaciones sentimentales con Martita, nunca del todo aclaradas en la película, han inspirado incluso un juego de mesa para adultos.
Del mismo modo, la personalidad de Berlanga es venerada en todo el país y las mejores firmas publicitarias le han ofrecido a sus top models para que practique con ellas todas las perversiones sexuales de las que siempre ha sido sano defensor y que por las circunstancias políticas de la España que le tocó vivir nunca pudo satisfacer plenamente. La misma Hillary Clinton comentó en público que no tendría ningún reparo en dejarse esposar y ser flagelada por el genial erotómano valenciano.Al guionista de la película, Rafael Azcona, le llueven ofertas para escribir segundas partes y la firma informática Macintosh le ha ofrecido un contrato publicitario que supera las cifras de los de Ronaldo y Michael Jordan, por utilizar sus ordenadores en próximos guiones. En la ciudad de Logroño, Texas, se están celebrando homenajes a su figura consistentes en festejos taurinos, degustación de pata negra y la iniciativa de sentar a un inmigrante a la mesa el día de Acción de Gracias y expulsarlo al día siguiente más allá de Río Grande, que es el eufemismo americano para practicar el nazismo.
El reestreno de la película ha recuperado la actualidad del tan añorado motocarro. La misma General Motors ha lanzado un modelo que reproduce el de la película incluida la estrella de Navidad en el techo. No es raro ver las freeway tan fotogénicas de los Estados Unidos repletas de estos populares utilitarios de tres ruedas que se han convertido en el vehículo preferido de esa cosa que se conoce como el americano medio, y que por lo general da tanto miedo.
La placidomanía, como todos los fenómenos sociológicos, arrastra a su paso tanto a entendidos en cine como a público vulgar. En los próximos meses se espera una versión musical en Broadway, una colección de cromos e incluso una serie de televisión que retoma los personajes más laterales de Luis Ciges y Manolo Alexandre, que en la sitcom de la NBC serán interpretados por Bruce Willis y Bill Cosby. Tal es la mercadotecnia.
La sola nota negativa de este espectacular relanzamiento de Plácido ha venido por la parte de los creadores de La guerra de las galaxias. Coincidiendo con los veinte años del estreno de su peliculita de ciencia-ficción, esperaban organizar una reposición masiva a nivel mundial apoyada en su inmensa plataforma publicitaria, pero el clásico de Berlanga ha copado el interés general y ha castigado a la trilogía galáctica con la más oscura de las indiferencias allá donde quiera que se estrenara. Y es que entre ambas películas existe un abismo en lo que a calidad se refiere, y la gente no se deja engatusar con facilidad.
No entiendo lo que quieres decir. Es gracioso el artículo de coña que escribe Trueba pero más allá de las bromas, no sé qué tiene que ver con la noticia de Vermut. Que me parece guay que se cuide nuestro patrimonio cultural y que se difunda en el exterior -es algo muy necesario- pero es que todo esto lo estás trayendo porque un tío ha comparado su próximo proyecto con Pulp Fiction y Fargo. Es mezclar churras con merinas.
OK,admito que puede parecer desproporcionado y que incluso lo sea.
Aunque para mi hay detalles constantes (como éste, tan sin importancia aparente), que me parecen síntomas de un problema profundo de quienes integran nuestro cine, un problema relacionado con la identidad (que no necesita ser castiza ni cañí), el marketing y hasta la mera supervivencia.
Pero a estas horas me basta con que el tono de nuestro debate sea razonable y razonado.
Continuará dentro de unos cuantos post, de eso estoy seguro.