Berger ya apuntó maneras en “Torremolinos 73”, con una puesta en escena brillante, así como una ambientación setentera minuciosa, impecable hasta el detalle.
Explotó un campo muy interesante desde el punto de vista erótico: el porno amateur. Más concretamente, español y de los setenta, lo cual es un plus amateur. Todo muy cutre, kitsch. Y por supuesto con gentes hiperrealistas.
Donde se ponga una cinta casera de una pareja real, con sus barrigas, sus celulitis, sus pelambreras, que se quiten los cuerpos plásticos y genitales perfectos.
Ok. Para muchos esos magníficos Javier Cámara y Candela Peña pueden ser el antimorbo total. Pero bordaron la pareja en crisis y se entregaron en cuerpo -nunca mejor dicho- y alma a sus interpretaciones.
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Más que erótica, me parece una gran comedia dramática. Aunque es cierto que explota el mundo del porno amateur y hay muchas escenas de sexo. Enormes Candela Peña y Javier Cámara en Torremolinos 73.
parami pocas veces volveran a estar candela peña y cámara tan bien como en esta peli… están brutales!!!!