La Junta Directiva de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España ha decidido conceder el Goya de Honor 2009 a Antonio Mercero por su inmejorable carrera cinematográfica, repleta de éxitos y de experimentos interesantes en campos tan amplios como el cortometraje, el mediometraje y el largometraje.
Además, ha conseguido desde siempre aunar humor y dolor en casi todas su producciones con un estilo personalísimo. Televisión y cine se han mezclado desde sus inicios.
Antonio Mercero cuenta con cincuenta años de profesión a sus espaldas desde que debutara en 1962 con su primer cortometraje profesional.
Desde entonces, su talento y sencilla visión del mundo del cine y la televisión, ha llegado a la pequeña y gran pantalla con títulos como La Cabina (1972) con el que consiguió numerosos premios internacionales, entre ellos el Emmy de la televisión norteamericana, La guerra de papá (1977), uno de los grandes hitos comerciales, Verano Azul (1979-1980), Buenas noches señor monstruo (1983) o Farmacia de guardia (1991-1995), Cuarta planta (2002) o su última película: ¿Y tú quién eres (2007).
Autor de un cine con un sello personal, cómico y a la vez tierno, Mercero ha realizado una obra que se ha convertido en el patrimonio sentimental de muchos españoles. Ha buceado en nuestra memoria histórica con películas como La guerra de papá, Espérame en el cielo, La hora de los valientes. En sus últimos trabajos, se ha enfrentado con coraje a enfermedades como el cáncer infantil (Planta Cuarta) y el alzheimer (Y tú quién eres).
Galardonado con la Concha de Oro y la Perla del Cantábrico en el Festival de Cine de San Sebastián, el Emmy de la Academia Nacional de Televisión y Ciencias de Nueva York, el Premio de la Crítica Internacional del Festival de Montecarlo o la Medalla de Oro de las Artes en 1996, entre otros premios, el genial director recibe el merecidísimo Goya de Honor de la Academia de Cine por toda una vida detrás de las cámaras.
Este galardón se entregará en la Gala de los XXIV Premios Goya que tendrá lugar el 14 de febrero de 2010.
Me alegro mucho porque es un buen profesional y una excelente persona.
ya solo por “La cabina” se lo merecería.
Y no olvidemos otra pequeña obra de arte “espérame en el Cielo” que debería ir dedicada a todos esos simpáticos incultos que dicen que solo se da una visión de la guerra civil y postguerra en el cine español
Sin él no habría existido
nuestro querido Chanquete,
un personaje querido
por lo entrañable y alegre,
un abuelito adoptivo
para muchos y por siempre.
Sin él no se habría estado
José Luis en la cabina
mostrando que su trabajo
tiene muy mucho de artista
y que no se ha limitado
a correr tras lindas Suizas.
Sin él no habría existido
una Farmacia de Guardia
donde encontrar un alivio,
una solución balsámica,
y en el fondo, sólo un sitio
donde olvidar las desgracias.
Sin él Tobi no sería
más que otro nombre de perro
y no aquel niño de alitas
que pronto descubriría
que su lugar era el cielo.
Gracias, Antonio Mercero
por los veranos azules,
por ese humor tan certero
y esos momentos tan dulces.